El mercado de pases en el fútbol argentino está transitando sus últimas horas y las transferencias entre los clubes no cesan. Por el lado de Boca Juniors, Leandro Brey se sumó como nuevo jugador pero, también, dejaría de contar con un importante goleador del torneo doméstico. Se va Wanchope.
Ramón Ábila hizo público su descontento y presionó para conseguir la salida del Xeneize. Todo indica que su futuro estaría en Santa Fe y que Julio César Falcioni lo recibiría en Colón, que este año disputará la Copa Libertadores. ¿Qué clase de delantero pierde uno y gana el otro?
Wanchope arribó a Boca en 2017 y, desde allí, disputó 83 encuentros y convirtió 36 goles. Si contabilizamos sus 13 asistencias, participó directamente de 49 tantos del equipo. Y eso que solo disputó 48 encuentros desde el arranque. Buen promedio.
Sin embargo, una de las máximas penas del paso de Ábila por El Xeneize ha sido su condición física. Precisamente, el ex delantero de Huracán acumuló 10 lesiones que le imposibilitaron ser parte de 25 partidos. Este 2022, sufrió un desgarro. Su punto más débil.
La llegada de Darío Benedetto, la recuperación de Nicolás Orsini y el fantástico presente de Luis Vázquez condujeron a que Boca tome la decisión de prescindir del goleador. ¿Tomaron la decisión correcta?