Desarrollo tecnológico e innovación
Los proyectos que resultaron aprobados son: “Desarrollo y escalado piloto de nuevas formulaciones de grasas lubricantes biodegradables”, de la empresa rosarina Andes S.A. en conjunto con investigadores de la Facultad de Ingeniería Química de la UNL y Conicet.
También recibirá financiamiento el proyecto titulado “Desarrollo de un prototipo para separación de la crema de la leche mediante centrifugación con capacidad de procesar 5.000 lt/h de leche, autolimpiante”, de la empresa Piazza Servicios Industriales, de Rosario, con investigadores del Centro de Investigación en Mecánica Computacional (UNL Conicet). Al respecto, el director del proyecto por parte de la empresa, Sebastián Piazza, sostuvo que “nuestra firma fabrica y repara repuestos de la industria láctea. El objetivo del proyecto es hacer una máquina nacional y accesible para las medianas empresas lácteas que sea desnatadora autolimpiante”.
Esta es la primera vez que Piazza Servicios Industriales obtiene un financiamiento y que trabaja con la UNL. “Esto es un reconocimiento para nosotros. Hacía muchos años que buscábamos la oportunidad para trabajar con la Universidad, el proceso fue espectacular”, afirmó Piazza.
Por otro lado, fue admitido el trabajo titulado “Desarrollo de un biofungicida agrícola para el tratamiento del damping off a partir de residuos de la industria champiñonera”, de la empresa Tienda Argentina S.R.L. de Colonia San José, junto con investigadores de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas de la UNL.
Además, se aprobó el proyecto “Desarrollo y validación a escala piloto de premezclas funcionales que contienen fibras provenientes de descartes de hortalizas de la región, que contribuyan a la mitigación de obesidad y patologías asociadas”, de la empresa de Gálvez, Vida Libre S.A., e investigadores de la Facultad de Ingeniería Química de la UNL y el Conicet. Sobre la admisión del proyecto, la titular, Graciela Savino, manifestó que “es un reconocimiento a las expectativas de crecimiento de la empresa y a la amplia experiencia del grupo que nos acompaña en este nuevo desafío”.
Savino también resaltó que Vida Libre tiene una larga trayectoria de colaboración con la Secretaría de Vinculación Tecnológica e Innovación de esta casa de estudios, ya que fueron la primera empresa incubada en el Centro Universitario Gálvez. “Siempre mantuvimos un trato fluido y nos ha permitido acceder a herramientas valiosas para el crecimiento del proyecto. Hoy, a pesar de la crisis por la que atraviesa el sector productivo, apostamos una vez más a la innovación de la mano de la Universidad”, afirmó la responsable de Vida Libre.
Por último, también fue admitido el proyecto “Desarrollo de un tratamiento integral de los efluentes líquidos de una empresa productora Pyme”, de la empresa esperancina Lácteos Pujol e investigadores de la FBCB, la FIQ y el Instituto de Instituto de Química Aplicada del Litoral.