Existen muchas semillas a las cuales se las considera un superalimento por ser una fuente de proteína, vitaminas, minerales y aceites saludables. Ideales para incluirlas en la dieta y tener una alimentación balanceada y sobre todo saludable, siempre que se consuman con moderación.
Estas son algunas opciones para consumir como snacks por si solas o añadirlas a ensaladas, yogurts, batidos, sopas, etc. Los expertos consideran que lo mejor es comerlas crudas, molidas o en puré, sin azúcar o sales añadidas.
1. Semillas de calabaza
Son ricas en vitamina B, ácidos grasos y minerales. Funcionan como antiinflamatorio, ayudan a limpiar el organismo, a reducir el colesterol y aportan una sustancia llamada L-triptófano que se considera un antidepresivo natural. Podés comerlas en ensaladas y postres, ya sea enteras, molidas o tostadas.
2. Semillas de girasol
Aportan ácidos grasos que colaboran a reducir el colesterol malo y mejoran la salud cardiovascular. Son una fuente natural de energía, mejoran el funcionamiento del sistema nervioso y contienen ácido fólico que ayuda al desarrollo del cuerpo. Contienen múltiples vitaminas E, B1, B2 y B3, hierro, potasio y son una fuente de omega 3.
3. Chía
Favorece el sistema digestivo, mejora el tránsito intestinal y es una fuente natural de energía y omega 3. Posee un efecto desinflamatorio y es rica en magnesio y zinc, dos minerales esenciales para el buen funcionamiento del sistema inmunológico.
4. Maní
Poseen vitaminas, minerales, proteínas y ayuda a el control de hormonas. Beneficia mucho a las mujeres ya que ayuda a fortalecer los huesos, reduciendo el riesgo de osteoporosis. Su contenido de vitamina E le dan propiedades antioxidantes para la piel.
5. Almendras
Satisfacen el hambre rápidamente, tienen diversas vitaminas y minerales, reducen el colesterol y ayudan a mantener sano el corazón.