China lanzó este domingo al espacio un satélite de exploración solar desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan, en el noroeste del país, con el objetivo de promover el esfuerzo científico del país para desentrañar los secretos del Sol.
El Observatorio Solar Avanzado basado en el Espacio (ASO-S, por sus siglas en inglés), apodado Kuafu-1 en chino, fue lanzado a bordo de un cohete Gran Marcha-2D a las 07:43 horas (hora de Beijing) y entró con éxito en su órbita planificada.
Luego de cuatro a seis meses de pruebas, el satélite de 859 kilogramos comenzará la operación normal a 720 kilómetros de la Tierra para estudiar la causalidad entre el campo magnético solar y dos fenómenos eruptivos importantes, a saber, las erupciones solares y las eyecciones de masa coronal, proporcionando los datos de apoyo para el pronóstico del tiempo espacial.
¡Allá va el 1er observatorio solar espacial de China!🚀Llamado ASO-S, tiene una vida útil de 4 años, su nickname es "Kuafu-1"por el gigante de la mitología china quien perseguía y trataba de atrapar al Sol. ☀️ pic.twitter.com/zTULssL5f6
— 天 (@ChinaEspacial) October 9, 2022
Persiguiendo al Sol
El observatorio solar, llamado así por Kuafu, un gigante en la mitología china que incansablemente persiguió al sol, extenderá sus horas de trabajo a más del 96 por ciento del año.
Un observatorio espacial que está operando en una órbita sincrónica al Sol no se ve obstaculizado por las rotaciones de la Tierra, mientras que un telescopio basado en la Tierra puede ver el sol sólo durante el día.
"ASO-S es capaz de sondear el Sol las 24 horas del día durante la mayor parte del año", destacó Gan Weiqun, el científico principal del satélite del Observatorio de la Montaña Púrpura (PMO, por sus siglas en inglés) bajo la Academia de Ciencias de China (CAS, por sus siglas en inglés). "Su tiempo de espera diario más largo no es más de 18 minutos cuando corre brevemente a través de la sombra de la Tierra cada día de mayo a agosto."
La sonda solar, con una vida proyectada de no menos de cuatro años, está diseñada para acumular y transmitir unos 500 gigabytes de datos en un día, lo que equivale a decenas de miles de imágenes de alta calidad.
"Los detectores a bordo toman fotografías cada pocos segundos o minutos, y durante las erupciones solares, pueden aumentar rápidamente su velocidad de obturación a sólo un segundo, con el fin de capturar las actividades solares con más detalles", añadió Huang Yu, diseñador jefe asociado del sistema de aplicación científica ASO-S.
Durante su operación en órbita, tres estaciones terrestres en las ciudades de Sanya, Kashgar y Beijing, muy distantes entre sí, recibirán datos del espacio, antes de enviarlos en paquetes durante los próximos cuatro años a un poderoso ordenador de 2.048 núcleos montado en el PMO para su descodificación.