Con la llegada de noviembre comienza el movimiento de consultas de alquileres por parte de los futuros estudiantes que se instalarán en la ciudad de Santa Fe.
Según explicó Walter Govone, presidente de la Cámara de Corredores Inmobiliarios, "el año pasado a esta fecha hubo un cuello de botella muy importante porque se volvía a la presencialidad en la mayoría de las instituciones educativas, hubo una gran afluencia de estudiantes y había edificios sin terminar, también por la pandemia. Había una gran demanda que no alcanzaba a ser satisfecha".
Esta situación cambió un poco, y si bien hoy en día en el segmento de departamentos hay mayor cantidad de oferta, no hay abundancia. "Si hay una faltante de casas, de viviendas familiares, porque no se construyen", agregó.
"Estamos mucho mejor que el año pasado pero sigue habiendo faltantes" sostuvo sobre una situación que varía según la situación económica de las familias. "Notamos que cuando la economía está mejor, los padres buscan alquilar departamentos solos para sus hijos, entonces hay mayor demanda de monoambientes o de un dormitorio. Pero cuando la economía no está tan bien como ahora, buscan alquilar departamentos y casas más grandes para amortizar gastos y vienen dos o tres chicos de la misma localidad" manifestó Govone.
Sobre la ley de alquileres, sostuvo que muchos propietarios se plantean que "quedan atados al valor durante un año, y no lo pueden aumentar y quedan muy atrasados". Esto genera que no se incentive el mercado y muchos deciden cambiarse al alquiler de espacios amoblados o los ponen a la venta.