Por lo general solemos asociar a los gatos con una imagen de independencia, creemos que son menos cariñosos que los perros y vemos en internet millones de memes al respecto.
Pero ahora, un estudio realizado por la Universidad Estatal de Oregón determinó que los gatos desarrollan un vínculo similar con sus humanos a los que desarrolla un perro o un niño pequeño.
Kristyn Vitale, investigadora, autora y directora del estudio comentó: "Tanto en los perros como en los gatos, el apego a los humanos puede representar una adaptación del vínculo entre la cría y el cuidador. El apego es un comportamiento biológicamente relevante. Nuestro estudio indica que cuando los gatos viven en un estado de dependencia con un humano, ese comportamiento de apego es flexible y la mayoría de los gatos usan a los humanos como una fuente de confort".
Detalles de la investigación
El estudio incluyó a 70 gatos de distintas edades, desde cachorros hasta adultos a los que se puso a prueba en una habitación. Los felinos permanecieron dos minutos en una habitación junto a su amor, luego dos minutos solos y luego dos minutos más juntos.
Esto determinó que el 64,3% de los gatos mostraron su apego de forma segura, mientras que el restante 35,7% se mostraron inseguros. Los primeros se mostraron menos estresados mientras que los segundos mostraron signos de estrés como mover la cola, lamer sus labios o se subieron al regazo de su amo.
"Una vez que un estilo de apego ha sido establecido entre el gato y su cuidador parece mantenerse relativamente estable con el tiempo, incluso después de una intervención de entrenamiento de socialización", concluyó la investigadora.