Con las llamas ya apagadas, la distribuidora que se incendió el pasado jueves en barrio Don Bosco sigue generando inconvenientes. Los comercios aledaños aseguran que sufrieron consecuencias y nadie les ha dado una solución.
"El problema que estamos teniendo es que después de seis días aparecieron desde la Municipalidad a ordenar esto. Pero nosotros hace casi una semana que no podemos trabajar. El dueño de la distribuidora no se acercó a ninguno de los vecinos y nosotros hemos tenido problemas. Tengo los tanque de agua quemados, los portones que no cierran, a los empleados se les paga igual y nadie nos ayuda" comentó al móvil de LT10, José, un comerciante de la cuadra.
En ese sentido, el vecino aseguró que "nosotros acá tenemos movimiento de camiones y no pudo entrar ninguno porque hay vallas en las esquinas. El negocio estuvo vacío todos estos días, recien esta mañana empezamos a trabajar".
"Lo peor es la angustia sufrida. Porque del agua uno se puede defender, pero con esto te quemas vivo, el calor te envolvía. Los bomberos no tenían agua ni elementos para apagar el fuego. Venía, estaban 10 minutos y se tenían que volver a cargar agua". aseguró Marcela, otra comerciante del barrio.
La comerciante expresó su preocupación porque en el local incendiado siguen trabajando. "Se están por caer las paredes y siguen trabajando. No sabemos si tenían matafuegos, si tenían regadores, ni si quiera sabemos si tienen seguro".
Otro de los vecinos, Nicolás, contó que "desde que arrancó el fuego nosotros empezamos a tirar con el matafuego hacia el portón porque no se podía salir del calor. La EPE y los bomberos se pasaron. Los chicos de bomberos con muy poco hicieron un montón" aseguraron los comerciantes.