El actual entrenador de la franquicia Crusaders, en el Super Rugby Pacific, firmará un contrato por cuatro años y señaló "Es un honor para mí y es un trabajo que conlleva una gran responsabilidad".
Robertson reemplazará en el cargo a Foster que intentará alcanzar en Francia el cuarto título mundial para los oceánicos, que integrarán en la Copa del Mundo el Grupo A junto a Francia, Italia, Uruguay y Namibia.
"Representar a tu país, como entrenador o jugador, es el máximo honor en el deporte y es una lección de humildad tener esa oportunidad. No puedo esperar", agregó Robertson quien continuará al frente de Crusaders en lo que resta del Super Rugby Pacific.
Robertson, de 48 años, jugó 23 veces para los All Blacks y en diciembre de 2001, en el estadio de River, marcó un agónico try que le dio el triunfo a Nueva Zelanda ante Los Pumas por 24 a 20.
El director ejecutivo de NZR, Mark Robinson, siente que Robertson es el entrenador adecuado para llevar al equipo hacia adelante: "Me gustaría felicitar a Scott por su nombramiento. Su historial como entrenador habla por sí mismo en términos de éxito, pero lo que quedó claro durante el proceso de la entrevista fue su enfoque innovador del juego, su pasión por sus jugadores y su deseo de contribuir al legado de los All Blacks".