Todas las personas utilizan el azúcar o edulcorantes para endulzar sus desayunos, comidas o meriendas, sea en mayor o menor medida. Pero acá te contaremos que pasaría si una persona deja de consumir repentinamente azúcar durante un mes, que consecuencias traería o que podría pasar a futuro.
Lo cierto es que el azúcar en exceso es perjudicial para la salud y para la regulación del azúcar en sangre, y es por ello que en varios países del mundo el consumo del endulzantes bajó considerablemente, pese a que los problemas de obesidad en el mundo siguen manteniéndose en los mismos números, según explica UK Health Security Agency.
De igual manera, reducir el azúcar en las dietas de las personas si es un beneficio a largo plazo, como por ejemplo, reducir la ingesta calórica, lograr perder peso, entre otras cosas. Pero esto traería algunos síntomas al corto plazo que con el tiempo irán desapareciendo.
La sacarosa que contiene el azúcar es la que activa los receptores de lo dulce en la boca, liberando la dopamina, que se libera cuando es algo placentero para las personas. Esta sustancia lo que hace es continuar buscando ese placer, obligando y empujando al cuerpo y cerebro a buscar dichos alimentos que contengan azúcar.
Como la dopamina tiene una gran relación con el cerebro, unos cientificos estudiaron cual es el comportamiento del cerebro cuando se deja de consumir el azúcar. Realizaron un estudio en ratas que dejó los siguientes resultados. Se describió que se podría alterar el procesamiento emocional, modificando así el comportamiento de los animales y personas.
El cerebro no se tomaría muy bien dejar el consumo de sacarosa, ya que podría causar mareos, dolores de cabeza, ansiedad, entre otros comportamientos repentinos ante la falta de dopamina producida por la sacarosa. Pese a que no esté al 100% comprobado, se dice que esto se debe a circuitos de recompensa que el cerebro fue formando.
Por otro lado, se habla de una posible “adicción” que produce el azúcar. Y esto se comprobó por estudios en ratones, los cuales tenían atracones por ansiedad o abstinencia, tal cual funciona en otras sustancias que son adictivas.