Eduardo es un empresario que vive en Estanislao Zeballos al 4.000, y que en un mes fue víctima de cinco robos.
Según contó por LT10, en la planta baja tiene un depósito y cocheras, mientras que vive con su familia en la planta alta. A un lado hay una dependencia del Registro Civil que también ha sido víctima frecuente de los robos.
La primera vez que entraron, el auto estaba sin llaves y se llevaron lo que había en su interior. Sin embardo, 15 días después, volvieron a entrar, y esta vez además de los robos, causaron destrozos. "Entraron por el patio del Registro Civil, a uno de los autos le hicieron palanca a los dos puertas, lo dejaron abierto como una lata de sardinas, y se llevaron la bateria, de todo y todos los elementos de hockey de mi hija" relató la víctima.
En consecuencia tomaron medidas de seguridad, como levantar paredes y poner pinchos en todas las medianeras. Sin embargo esto no sirvió de nada y los delincuentes volvieron a ingresar y vandalizar un vehículo para llevarse lo que estaba en su interior.
Pero ahí no se termina, los ladrones volvieron y accedieron al patio de la planta alta y por la ventana del lavadero, se llevaron toda la indumentaria que pudieron agarrar.
Cansado de esta situación, Eduardo decidió quedarse despierto y oficiar de sereno dentro de su porpia casa. Se quedó en la cocina y con la luz encendida. Fue entonces cuando escuchó un silbido y al salir a revisar no encontró nada.
La víctima asegura que todos saben quienes son los delincuentes desde el primer robo, incluso la policía, ya que en una ocasión los atraparon con elementos robados al Registro Civil. Además, los tienen en registros fílmicos, ya que varios vecinos tienen cámaras de seguridad.