Tras reiterados episodios delictivos registrados en comercios y supermercados, el Gobierno insiste en que se trata de un accionar organizado e incentivado por el presidencial libertario Javier Milei. Así lo precisó la portavoz Gabriela Cerruti, quien explicó además los libertarios generaron el clima que dio pie a los hechos vandálicos vía redes sociales.
"Cuando no había sucedido ningún episodio concreto, solo corridas y grupos de WhatsApp incentivando, Milei decía que esto era el 2001 en redes sociales", sostuvo, y agregó: "Todo el clima que se fue generando en las redes, que tenemos que considerarlas un actor fundamental".
Asimismo, responsabilizó al diputado de La Libertad Avanza y a la candidata de PRO, Patricia Bullrich, de propagar los disturbios registrados en algunos barrios porteños y en las provincias de Mendoza y Córdoba. "Tenemos candidatos de la oposición que están yendo a las elecciones en octubre. El clima que se fue generando era de cuentas ligadas a los grupos de Libertad Avanza y también a los grupos de Bullrich", afirmó en declaraciones radiales.
En sintonía, precisó: "Bullrich debe tener añoranzas del 2001 que ella protagonizó. Tenemos dos candidatos protagonistas, en el caso de Milei, por su entorno, y ella, protagonista clara del 2001. Construyen su discurso público de la añoranza que tienen para que la democracia cruja y se desestabilice".
"Hasta los gobernadores, gente que no tiene que ver con nuestra fuerza, está advirtiendo que esto está sucediendo y está organizado", expuso la portavoz, y sumó: "Hay que ser un poco más responsables todos".
Para la funcionaria, se trató de grupos de personas "muy jovencitas" que en simultáneo atacaron comercios "buscando objetos que no son de primera necesidad" y que representan "la foto de que es algo armado y buscando repercusión". "Lo que es cierto es que hay más de 30 personas detenidas. Los cometen actos criminales tendrán las consecuencias penales que les corresponde", prometió.
Por último, reveló que el presidente Alberto Fernández sigue de cerca los episodios vandálicos y hasta se comunicó con una comerciante de Río Cuarto, una de las primeras en sufrir el robo de su local. "El Presidente se comunicó con la dueña de su lugar en Córdoba y ella le comentó que eran una banda de delincuentes", concluyó.