En medio de un tumulto generalizado, con un partido suspendido y declaraciones cruzadas entre varios protagonistas de Tigre y Chacarita, Fernando Brandán abandonó el estadio en el micro que llevó al plantel pero luego trasladado a una clínica ocular (Hospital Santa Lucía) para someterse a un examen médico, donde trataron su ojo afectado.
"Tuvo un traumatismo en la región ocular y en la arcada cigomática derecha. Al examen físico está con una inyección conjuntival, con edema en la zona, dolor, dificultad para la movilidad del globo ocular y unas fotopsias (destellos que se ven sin estímulos luminosos). Hay que ver cómo sigue esto", dijo Ayelén Pucci, médica de Chacarita, sobre su informe presentado al árbitro.
Luego, al consultarle sobre la imposibilidad del futbolista de seguir en cancha, remarcó: "Por lo menos no puede ver de esa región del ojo, esa parte la tiene sin visión por lo menos hasta el momento. Tiene una visión dificultosa al momento".
El parte médico emitido, expresa: "Presenta inflamación periorbital derecha, acompañado de edema y eritema subconjuntival. A la exploración y palpación se observa dolor a la legalización del ojo. Se realizan radiografías de cráneo huesos propios de la nariz y órbitas y no se observan trazos fracturarios. Se indica 24hs de reposo, pautas de alarma y control oftalmológico".
La agresión ocurrió luego de que el árbitro Ariel Penel expulsara al volante de Tigre Agustín Cardozo, y apenas instantes después de que el "Matador" se pusiera en ventaja con un gol de Brahian Alemán. El partido se jugó sin la presencia de simpatizantes de Chacarita, con el acceso prohibido por una sanción de los organismos de seguridad luego de los episodios de violencia en los que murió un hincha el pasado 3 de febrero, en su estadio de San Martín, en el encuentro ante Deportivo Maipú.