La ministra de Seguridad anticipó que viajará a Rosario junto al ministro de Defensa, Luis Petri, para montar un operativo con las fuerzas de seguridad para controlar la calle de la ciudad.
“Vamos a dar a conocer los aspectos operacionales. Obvio que hay algunos que no por una cuestión lógica, pero vamos a redoblar todos los esfuerzos”, aseguró en diálogo con Luis Majul.
“Es importante que tengamos total y absoluto control del territorio en la investigación, la inteligencia criminal. No podemos tener gente dando vuelta y decir que ya los tenemos. La tarea fundamental que tenemos que hacer es cercar. Controlar el territorio para que la sociedad se sienta segura”, indicó la funcionaria.
Y apuntó contra la oposición por no haberle otorgado al Gobierno la emergencia en materia de seguridad, en la votación del proyecto de ley ómnibus en el Congreso.
“Hoy explota Rosario y no tengo emergencia en seguridad porque el Parlamento no la votó. Yo pregunto: ¿Los parlamentarios que no la votaron se hacen cargo de que yo necesitaría tener recursos más rápido para combatir lo que está pasando y los asesinatos a mansalva?”.
“La verdad es que nosotros seguimos avanzando con o sin las herramientas”, reflexionó y agregó: “Habíamos pedido eso porque sabemos que cuando se empieza a apretar al delito, este reacciona, sobre todo cuando lo han dejado armarse”.
A su vez, reconoció que trabaja con los ministros de seguridad de todos los distritos para enfrentar al crimen organizado y la inseguridad en las provincias: “Son tan importantes los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires o Santa Fe como los de cualquier otra parte del país”.
Asimismo, detalló que se enviarán refuerzos de diferentes fuerzas de seguridad. Mencionó a Gendarmería, Prefectura Naval y Seguridad Aeroportuaria. “También estamos bajando lanchas inteligentes para el control de la hidrovía y trabajando con la Policía Federal, en especial, en la parte de inteligencia criminal”.
De esta forma consideró que los asesinatos a los dos taxistas, al colectivero y al playero de una estación de servicio buscan amedrentar los trabajos del Gobierno, generar conmoción en la sociedad y que, como consecuencia, se “afloje” en la tarea de controlar el territorio. “El negocio criminal, al haber más control territorial, se dificulta”, indicó.