Cuando la conferencia era todo alegría y optimismo por el gran triunfo de Colón ante Nueva Chicago, en un duelo clave por la punta de la Zona B de la Primera Nacional, a Iván Delfino se le dibujó una mueca.
Fue cuando se le preguntó por la Copa Argentina, y sobre la idea que tenía para el debut ante Los Andes, que estaba pautado para el miércoles 10 de abril a las 19.15, en el estadio Eva Perón de Junín.
Sobre esto, el DT reveló que "es incómodo por los tiempos. Jugamos el miércoles y el sábado. Habrá poco descanso si es así, con viajes encima. Son cosas que se podían haber manejado mejor, pero no tengo nada definido.
Delfino modificó los planes de la semana, y luego de la victoria ante el Torito, el plantel no tuvo descanso, ya que trabajó sábado y domingo, con la mente puesta en el viaje a Junín para el choque ante Los Andes, y luego para hacerlo a Castelar para el duelo ante Morón por la Primera Nacional.
El plantel de Colón cuenta con varios jugadores con molestias y otros con lesiones, como son los casos de Axel Rodríguez y Javier Toledo, quienes se perderían ambos encuentros. De esta manera, la suspensión le vino bien para poder considerarlos para el duelo ante Los Andes, cuando se dispute, ya que se considera que estarían a disposición para el momento que se reprograme.
Pero también trajo un gran alivio ya que el plantel primero tenía que viajar a Junín, hacer noche de martes para miércoles, lego del partido tenía pensado permanecer en dicha ciudad, y al otro día viajar a Santa Fe, para con breves ensayos preparar el partido ante Morón, con lo cual el viernes después del medodái iba a emprender el viaje rumbo a Castelar.
Así las cosas, más allá que habrá que ver cómo afecta en el momento que se reprograme, está claro que como lo afirmó Delfino era incómodo cómo se lo había colocado a ambos partidos, con lo cual oxigenará la semana de trabajos con la mente puesta solamente en defender la punta de la Zona B en su visita a Deportivo Morón.