En medio de un panorama político que se intensifica en Banfield, Walter Erviti, figura emblemática del equipo que se consagró campeón en el Apertura 2009, arremetió contra la gestión actual del club, liderada por Eduardo Spinosa.
Erviti, quien recientemente dejó su cargo como entrenador en Audax Italiano de Chile y planea incursionar en la política del Taladro, expresó su preocupación por el rumbo de la institución.
"Banfield tiene que agradecer que hay 28 equipos, si no hubiese descendido siete u ocho veces en los últimos diez años", afirmó Erviti en una entrevista en el programa Fútbol y Rosca, transmitido por radio Splendid AM 990.
Sus palabras reflejan un profundo descontento con la dirección del club, aludiendo a la recurrente amenaza del descenso que ha enfrentado Banfield en temporadas pasadas.
En cuanto a sus aspiraciones políticas en la institución del Sur, Erviti manifestó su interés en aportar su experiencia y conocimientos para revitalizar al equipo.
Aunque no precisó un cargo específico, señaló su preferencia por un rol que le permita contribuir sin las limitaciones de un contrato, mencionando la posibilidad de desempeñarse como manager o en una función similar.
Sin embargo, el ex jugador hizo hincapié en que su objetivo no es confrontar con la actual dirigencia, sino trabajar en favor de Banfield. "No es en contra de Spinosa, es a favor de Banfield, a favor de poder trabajar en un club donde el fútbol dejó de ser protagonista hace tiempo", aseguró Erviti, destacando la necesidad de reconducir al equipo hacia la competitividad que alguna vez caracterizó al Taladro.
Erviti, sobre Boca y San Lorenzo
Erviti también elogió el desempeño de Boca, reconociendo el trabajo del entrenador Diego Martínez y la evolución del equipo, especialmente en la promoción de jóvenes talentos.
“Me gusta ver al equipo de Martínez, me gusta ver a los jugadores de Boca. Creo que está empezando a cosechar todos los partidos que le ha dado a los juveniles en los procesos anteriores”, destacó.
Además, expresó su afecto y agradecimiento hacia San Lorenzo, a pesar de desavenencias pasadas con la directiva del club: “La realidad es que yo no es que quiera dirigir o no a San Lorenzo. Yo lo que sí me gustaría es que la gente de San Lorenzo tenga en claro que yo he estado agradecido siempre de la oportunidad que me dieron, de esa manera defendí la camiseta en los partidos que me tocó jugar, y ese es el recuerdo que tengo. Dios dirá si tengo que ser entrenador”.