En la cocina de las abuelas era lo más habitual: el caldo de huesos hirviendo a fuego lento. En la actualidad, se empezó a revalorizar esta receta ancestral, por sus beneficios y propiedades para la salud.
Su preparación es muy sencilla, y se origina en la necesidad de aprovechar todas las partes de los animales. Se utilizan diversos tipos de hueso, y las verduras de estación que le brinden sabor al caldo.
Cuáles son los beneficios para la salud del caldo de huesos
- Refuerza el sistema inmunológico.
- Es bajo en calorías.
- Favorece la salud digestiva.
- Restaura el colágeno.
- Reduce la inflamación.
- Desintoxica el hígado.
- Mejora la calidad del sueño.
Cómo preparar el caldo de huesos para aprovechar mejor sus cualidades
Ingredientes
- 1 kilo de huesos (de pollo, cerdo, pavo, cordero, vaca o combinados).
- Vegetales frescos: cebollas, puerros, zanahorias, apio o col verde.
- 2 cucharadas de vinagre de manzana sin filtrar.
- Condimentos a gusto: cúrcuma, perejil, ajo, tomillo, romero, jengibre, cardamomo, cilantro.
- 1 hoja de laurel.
- 2 o 3 litros de agua.
- Sal.
Preparación
- Colocar en una cacerola grande las verduras cortadas en cubos y los huesosos.
- Cocinar a temperatura baja durante 24 a 36 horas (DSe puede interrumpir la cocción para no dejar prendido el fuego cuando dormimos). Retirar los huesos y las verduras.
- Colocar el líquido en recipientes herméticos.
- El caldo de huesos puede almacenarse en la heladera por 5 o 6 días. Si lo guardamos en el freezer, dura varios meses sin perder sus propiedades.
Se recomienda su consumo antes de las comidas. Aporta ácidos grasos esenciales, proteínas, colágeno, grasas omega 3 y 6, aminoácidos, minerales como magnesio, manganeso, potasio, calcio, zinc, hierro y vitaminas A y K.
Aunque los huesos más populares pqara el caldo son los de la médula de la res, (caracú) o el rabo, también son muy buenos los de pollo, pescado o camarones, ya que tienen mucho colágeno en las partes de los cartílagos y huesos.