En el Estadio Libertadores de América, Huracán le ganó por 5-4 en la definición por penales a Argentinos Juniors después de igualar 1-1 en el tiempo reglamentario y selló su pasaje a los cuartos de final de la Copa Argentina. Sin embargo, el transcurso del partido se hizo a un lado porque los hinchas del Globo volvieron a gritar un gol de Wanchope Ábila después de siete años: luego de un tanto mal anulado por una supuesta posición adelantada, el delantero tuvo revancha y a los 10 minutos de la segunda parte mandó al Bicho a sacar del medio.
Detrás de un centro desde la derecha de Souto y con un tanto de complicidad de Román Vega, el jugador con pasado reciente en Colón solo tuvo que empujar la pelota, para darle, hasta el momento, la victoria al equipo de Parque Patricios sobre los de la Paternal.
Sin embargo, el delantero que había jugado media hora contra River en el Monumental y que no venía siendo tenido en cuenta por Frank Kudelka, había gritado otro gol que no fue convalidado por Nazareno Arasa, el árbitro del partido. La jugada se había originado a través de un tiro libre que Héctor Fertóli mandó al área. La pelota rebotó en un jugador y le quedó al intratable Walter Mazzantti, quien apareció por el segundo palo y tiró el centro atrás para que el goleador solo tenga que impulsar el balón.
La felicidad del goleador histórico duró apenas unos segundos porque el línea levantó la bandera y le impidió hundirse en un grito desaforado de gol. Y aunque se retiró a falta de veinte minutos, Ramón se fue del Ricardo Enrique Bochini habiéndose reafirmado como el máximo goleador de la Copa Argentina con 15 goles.
Después de una larga definición por penales, Huracán clasificó a los cuartos de final de la Copa Argentina y dejó en el camino a Argentinos Juniors. En TyC Sports, Ramón Wanchope Ábila se mostró muy contento por volver al gol y habló sobre la relación con Frank Darío Kudelka, el entrenador del Globo: “La verdad muy contento, feliz de poder volver a convertir, de reencontrarme con esta gente que nos tenemos mucho cariño, que nos extrañábamos y que hoy el gol nos da ese reencuentro que tanto esperábamos".
Y cerró: "Hubo una dedicatoria a Kudelka porque lo conozco hace mucho tiempo y hoy volvernos a encontrar acá por cómo está el equipo, cómo viene funcionando y que me de la confianza de poder jugar. Uno siempre se lo tiene que devolver y yo sirvo para hacer goles. Es más o menos lo único que sé hacer así que… Nada, ese es mi trabajo así que me voy contento cuando lo puedo hacer”.