Unión se vuelve a Santa Fe con una enorme frustración por la derrota por goleada ante Tigre 5-1. Justo cuando se le abrió nuevamente la chance de quedar como puntero, pero lo dejó pasar en la que sin dudas es la peor actuación del año.
Por eso en conferencia de prensa el DT Cristian González fue auténcipo como siempre y no tuvo reparos al hacer su balance, claramente en caliente: "Esto nos tiene que servir. Dejamos pasar la oportunidad de ponerlos primeros. No tengo la explicación, porque hicimos todo mal y no estuvimos a la altura. Nos tiene que servir. Ahora en casa tenemos que ganar".
"No hay nada positivo. No se hizo nada de lo que hablamos. Hay que darnos cuenta de lo que se hizo ya está y hay que demostrar que estás a la altura y dejamos pasar la chance. Sé que esto nos va a servir. Obvio que no niego lo que pasó en el partido, que fue horrible lo hicimos. Desde que estoy acá nunca habíamos padecido un partido así. El mérito para Tigre, que nos supero", agregó.
En cada palabra se notaba que estaba abatido y hasta sorprendido por el nivel: "Ahora es fácil con esta derrota hacer hincapié en lo que estuvimos viviendo. Los que jugaron son los mismos que le ganaron a Argentinos. Nunca puse excusas y todos saben lo que pasó. Pero ya está, pasó. Hicimos un partido lamentable, para el olvido y no rescato nada. El fútbol te obliga a estar a al altura y no estuvimos. Nos fallamos a nosotros y a la gente, pero esto continúa y ahora se viene otro partido importante en casa, donde trataremos de recuperar el nivel. No encuentro explicación a lo que pasó en este partido".
"Tener más juego y profundidad, pero estábamos lejos de todo. Hubo un desajuste total del equipo. Encima de arranque en el segundo nos hicieron uno y otro. Fueron fatales. Pero esto es fútbol y nos tenemos que recuperar rápido. Hay que estar a la altura y no estuvimos como debíamos hacerlo. En el fútbol son piñas en la boca que nos hacen reaccionar", exclamó el conductor rojiblanco.
Kily espera refuerzos en Unión
Sobre la llegada de caras nuevas, reflexionó hasta con lamento: "Haremos lo posible para traer jugadores, pero cuando hablás y el club está inhibido es mucho más complicado. Los que buscamos no estaban en Argentina. El tiempo pasó, así que ahora habrá que hilar muy fino. Veníamos haciendo las cosas bien y este es un golpe de realidad para saber que hay que estar a la altura. Sé igual que nos vamos a recuperar. Esto es un aprendizaje".
"Hablaré con plantel. Solo me preocupa eso. Hicimos un partido horrible y nos tiene que dolores muchísimo, pero esto continúa y sé que el viernes vamos a ganar en Santa Fe. La humildad. No podemos permitirnos otra actuación así", tiró.
Mientras que en el final, fue enérgico respecto a los rumores que lo vinculan con Boca: "Tengo la camiseta de Unión y no me llamó nadie. Voy a respetar esta camiseta. Los rumores siempre están. Estoy convencido de esto y ya está. Estoy muy caliente y enojado, por lo que no encuentro explicación a lo que pasó, porque teníamos todo para ser punteros del campeonato. Pero estas cosas pasan y hay que aceptarlo. No puedo andar pensando si me quiere Boca u otro equipo".