En la tarde de este lunes, en coincidencia con el Día de San Jerónimo, patrono de Santa Fe, fue ordenado obispo auxiliar de la Arquidiócesis local el padre Matías Vecino.
La ceremonia, que se realizó en la Basílica de Guadalupe, hacía 50 años que no se daba en nuestra ciudad.
En su visita a LT10, Vecino destacó el rol de la parroquia para contener y prevenir acciones como las adicciones.
Además, habló de su vida y cómo llegó a Dios: "Tomé la comunión de grande, a los 16, no en la edad en la que lo hacen los nenes. Mi familia no era para nada religiosa, mi papá era bastante anticlerical. En el 95 se enferma, en su momento no sabíamos que, y con el tiempo entendí que era ELA. En el ínterin mi mamá decide enviarnos a catequesis a mi y a mi hermano para pedir por mi papá".
"Yo no tenía ni idea de para qué íbamos, y la catequista nos explicaba que nos estábamos preparando para recibir el cuerpo de cristo (...) pero desde ese momento pasó algo en mi corazón, empecé a ir a misa, cuando pude tomar la comunión, lo hice todos los domingos y empecé a ir más días y en un momento dije ´quiero esto para mi vida. Tener a Jesús y llevárselo a los demás" detalló Vecino.
Por ese motivo asegura que le "gusta mucho la vida de la parroquia".
"Todavía estoy expectante y siento que Jesús me pide esto y él se hará cargo de mi felicidad. Entiendo que psicológicamente todavía me tengo que acostumbrar" concluyó.
¿Qué función cumplen los obispos auxiliares?
El Obispo auxiliar, como su nombre lo indica, es un importante apoyo para que las tareas pastorales y de gobierno de una diócesis, con una población numerosa o con circunstancias complejas se realicen de una manera más ágil y conveniente. Los obispos auxiliares son cooperadores del obispo Diocesano en su función pastoral, asistiéndolo en todo el gobierno de la diócesis, y haciendo sus veces cuando se encuentre ausente o impedido. Están llamados a compartir las preocupaciones del obispo diocesano, y a desempeñar su función en perfecta armonía con él.