Nuestra dieta debe contener alimentos ricos en nutrientes para así garantizar que el cuerpo funcione correctamente y pueda mantenerse a través de los años. Verduras, frutas, cereales integrales, legumbres, aceite de oliva, pescados, frutos secos, lácteos, carnes blancas y huevos no deberían de faltar, según la Clínica Barcelona, de España.
Siempre que se habla del cuidado de la salud, no solo algunos alimentos aparecen entre las recomendaciones, sino que la actividad física es un complemento necesario. Es en este marco que hoy destacaremos una fruta como una aliada para la salud y para combatir la fatiga muscular, combatir calambres y, además, mejorar la salud digestiva.
Una fruta que suma
La fatiga muscular se presenta cuando las fibras musculares pierden su capacidad para contraerse y relajarse, y es provocada por una deficiencia de alguna de las moléculas que forman parte de la cadena de reacciones químicas que ocurren durante el ciclo contracción/relajación, afirma un informe de la Dirección Estatal de Deportes CETYS Universidad en Mexico.
Desde el Instituto Europeo de Nutrición y Salud señalan que la fatiga muscular tiene como consecuencia que se experimente una sensación de agotamiento, los músculos fallen y se pierda una parte o la totalidad de la capacidad física. Además, afirma que para prevenirla se debe mantener una hidratación adecuada, dormir lo suficiente, realizar ejercicios de calentamiento y estiramiento, no entrenar de más e ingerir alimentos que aporten hidratos de carbono.
Al respecto, la fruta que se aconseja sumar a los alimentos de nuestra dieta es el durazno ya que aporta fibra, potasio y vitamina C, según la Fundación Española de la Nutrición. El durazno es una excelente opción para quienes realizan deportes de manera regular ya que su contenido nutricional ayuda a combatir la fatiga muscular y los calambres. Se trata de una fruta muy versátil a la hora de su consumo por lo que incluirla en nuestra rutina alimenticia no resulta difícil, pero sí muy beneficiosa.