Unión pegó fuerte y dio la nota al superar a Vélez, poniendo la definición de la Liga Profesional el rojo vivo. No solo que se plantó en ser parte de la fiesta de otro para armar la suya, ya que con el triunfo alimentó la ilusión de jugar nuevamente la Copa Sudamericana.
Uno de los detalles que se mantienen inalterable es la diferencia que marca en los segundos tiempos. En este caso, llegó al gol a los 8' del complemento (Elías Gómez, en contra) y luego se la bancó. Algo que no sorprende, ya que es una tendencia durante todo el campeonato.
Es junto a Talleres, uno de los mejores en este sentido, con una efectividad del 56%, con 12 triunfos, ocho empates y 6 derrotas. Marcó 19 goles y recibió 13. Claramente algo pasa en los entretiempos y el mensaje que baja Kily González.
Lo que siempre le costó fueron los primeros actos, donde increíblemente es de los peores, con un 30% de factibilidad: ganó tres, empató 15 y perdió ocho. La lectura es que, con un poco más de regularidad, Unión pudo terminar un poco más arriba.
Pero igual, la campaña es más que positiva, ya que hace un año atrás, el equipo se estaba debatiendo por no descender.