Comenzó la cuenta regresiva para la edición 47 de la Maratón Santa Fe-Coronda del próximo domingo, desde las 9.30, por lo que la expectativa va en aumento. No solo de los organizadores y la gente, sino también en los nadadores, que toman esta carrera como un reto sinigual.
Varios ya conocen la experiencia y más allá del desafío físico, lo mental cumple un papel preponderante. Sobre todo en los momentos complicados y adversos. Así lo entendió la valesana Erika Yenssen, que se ilusiona con pelear entre los primeros puestos en charla con Diez en Deportes: "Ya se acerca la fecha, así que ansiosa".
"El agua caliente no es buena y afecta a todos. Quizás al ser de por acá estoy más acostumbrada. Deseo que descienda un poco, porque andaba por los 31 grados. En una carrera larga y a contracorriente, es un condicionante. Más desafiante. Veremos cómo sale todo. Estoy con la cabeza de que será una prueba bastante dura", acotó la nadadora.
También, resaltó las condiciones de otra de las exponentes que llega con gran cartel, Mayte Puca: "Es una gran nadadora y la admiro. Sé que viene preparada y nadamos juntas en Canadá. Ganó Capri Nápoles y estará en buenas condiciones".
En el final, confesó: "Vengo tranquila. Quizás ser local me hace estar más tranquila. Además, tengo experiencia y puedo manejar un poco la ansiedad. El objetivo primordial es terminar la prueba. No olvidar eso y el deseo es pelear en las primeras posiciones. En nueve horas puede pasar cualquier cosa".