Axel Kicillof pateó el tablero y anunció que en la provincia de Buenos Aires se votará por separado de las elecciones nacionales. La jugada agitó fuerte la interna en Unión por la Patria y expuso las tensiones con el kirchnerismo más duro.
El ministro de Kicillof, Andrés "el Cuervo" Larroque -uno de los más cercanos al gobernador- salió a bancar fuertemente la decisión y disparó con todo contra "el grupito de Máximo Kirchner". La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza -una de las más enfrentadas a Kicillof- lo acusó de romper la unidad. El massismo pidió calmar las aguas.
“El primer golpe fue el acto de Máximo en Atenas”, dijo Larroque en declaraciones radiales y advirtió que: “Cristina está rehén del grupito de Máximo”. El ministro de Desarrollo de la Comunidad defendió al gobernador y planteó que el desdoblamiento busca afirmar la identidad bonaerense frente a un escenario nacional adverso.
"Nuestro planteo es defender la Provincia para reconstruir un proyecto nacional, esa es la única esperanza. Pareciera que algunos sectores ponen más énfasis en disputar la Provincia que en defenderla e iluminar una esperanza hacia futuro"Cerró con un mensaje directo: “Hay que cerrar filas con Axel. Es la figura institucional más fuerte que tiene hoy el peronismo en el país".
La réplica del kirchnerismo
Desde Quilmes, Mayra Mendoza salió a responder: “Kicillof plantea un escenario funcional a Milei”. Dijo que la prioridad debería ser cuidar a los bonaerenses y que lo que hizo el gobernador va contra la línea de Cristina.
“Cristina nos pidió una elección unificada para cuidar la fuerza política y a la gente. Axel eligió otro camino”. Para ella, el desdoblamiento divide al peronismo y rompe la unidad.
"Nunca se desdobló una elección y esto también hace que haya consecuencias, porque Cristina dijo claramente que si no íbamos en unidad, que es lo que se necesita, y si hay un desdoblamiento, que es lo que dijo ayer Axel, ella iba a ser candidata. Entonces, Axel lo que hizo ayer por romper la unidad, lo que genera es un escenario donde Cristina, como militante que es, va a salir a representar sus votos, que son los que tiene, y sobre todo en la provincia y en el país", planteó.
"Es una de las personas con mayor caudal electoral aún hoy, luego de 10 años de haber sido presidenta. En la memoria de los argentinos está que su vida era mejor con Cristina presidenta, y luego los gobiernos de Néstor y Cristina. Así que será candidata en la tercera sección electoral como ya lo dijo", insistió.
También cuestionó las formas: “Nos enteramos por el decreto, no hubo diálogo. Estábamos hablando y de golpe se oficializó todo”. Y dudó de la lógica detrás de la movida: “¿Qué sentido tiene votar dos veces en un mes?”.
Además, advirtió que, si no se suspenden las PASO, podría haber tres elecciones. “Es una locura total. El país necesita otra cosa: unidad, una campaña fuerte, no esta dispersión”.
¿Y el massismo?
Sebastián Galmarini, hermano de Malena y dirigente del Frente Renovador, buscó bajar un cambio: “Massa quiere que sigamos todos juntos porque lo importante es frenar a Milei”. Admitió que hay diferencias, pero dijo que ya se superaron: “Axel tomó una decisión, hubo cruces, pero el tema está saldado”.
Eso sí, dejó en claro que no bajan los brazos: “Vamos a seguir laburando hasta el final para llegar a un acuerdo lo más amplio posible”. Para Galmarini, hay que entender que tener autonomía no es sinónimo de conflicto: “Pensar distinto no debería ser un drama”.
Por ahora, la decisión sigue firme. Pero el calendario electoral deja margen para algún volantazo. En algunos sectores insisten con dar marcha atrás o al menos buscar una elección concurrente. Mientras tanto, la interna del peronismo suma un nuevo round, con Cristina en el centro del ring.