La 12ª edición de los Premios Platino, celebrada en el Palacio Municipal IFEMA de Madrid, dejó un momento imborrable para el cine argentino: Daniel Fanego fue homenajeado de manera póstuma y ganó el premio a Mejor actor de reparto por su papel en El Jockey, de Luis Ortega. Fue el único galardón que obtuvo Argentina en la noche.
Antes de la entrega, la actriz Adriana Barraza dedicó un emotivo homenaje a Fanego, fallecido el 19 de septiembre de 2024, destacando su incansable compromiso con Teatro por la Identidad y su huella en el arte nacional. Luego, el momento más emotivo llegó cuando Manu Fanego, hijo del actor, subió al escenario para recibir la estatuilla.
"Mi padre tampoco pudo venir hoy. A él le hubiera encantado estar acá, beber, comer, pasear por Madrid. Y eso es lo que estamos haciendo", expresó Manu, despertando una ovación de pie del público, que celebró su calidez y sentido del humor.
La gala, que comenzó con expectativas para varios representantes argentinos, terminó con varias figuras nominadas, como Benjamín Vicuña y Darío Grandinetti, regresando sin premios. Además, en la alfombra roja se repitió la preocupación por la crisis que atraviesa el cine argentino tras los recortes de subsidios en 2024.
La ceremonia también dedicó un segmento especial a la trayectoria de Daniel Fanego, repasando su legado en el cine, el teatro y la televisión. Protagonista de films como Eva no duerme, El Fausto criollo y Desde el abismo, y recordado por su inconfundible voz y su entrega total a cada personaje, Fanego fue despedido con emoción por toda la comunidad artística iberoamericana.
Su última aparición en la pantalla grande fue en El Jockey, película que ahora corona su carrera con un reconocimiento que, aunque no pudo recibir en vida, celebra su enorme talento y compromiso con la cultura.