Alonso llegó a la Q3 en la clasificación al Sprint antes de que la mala suerte lo encontrara en el Sprint, el contacto con un Liam Lawson demasiado entusiasta hizo que el español hiciera girar contra las barreras. Lance Stroll logró mantenerse fuera de problemas en el Sprint y subió hasta el quinto lugar gracias a una serie de penalizaciones de tiempo para sus rivales. Pero ese fue el último positivo para el equipo.
Ambos pilotos cayeron en la clasificación en la Q1, antes de carecer del ritmo para avanzar en la carrera, a Alonso tampoco le ayudó un trompo con los neumáticos duros en el primer stint.
"Carrera dura", fue la breve valoración de Alonso. "No tuvimos el ritmo en todo el fin de semana y esperábamos que la carrera fuera difícil. Hoy nos enfrentamos a desafíos similares a los que hemos tenido durante toda la temporada y no pudimos capitalizar el caos que teníamos por delante.
"Tenemos que mejorar y ojalá en Imola demos un paso adelante".
"Ha sido una carrera difícil para nosotros hoy y unas condiciones muy complicadas, como esperábamos", añadió Stroll. "Simplemente nos falta ritmo, hemos sido lentos toda la temporada hasta ahora y hoy no ha sido una excepción.
Stroll ha anotado los 14 puntos del equipo hasta ahora en su mayoría gracias a una fuerte conducción en Australia en condiciones húmedas y secas similares a las del Sprint de Miami.
"Era importante que anotáramos cuatro puntos con Lance ayer en el Sprint, pero en condiciones normales de seco no tenemos un coche capaz de competir por los puntos en este momento. Tenemos que seguir analizando dónde podemos mejorar y trabajar duro para ser más competitivos en Imola", dijo el director del equipo, Andy Cowell.
Aston Martin se mantiene en la séptima posición en el campeonato de equipos, por delante de Racing Bulls, Alpine y Kick Sauber.