Los primeros minutos fueron como se esperaba: friccionados, físicos y con mucha presencia en el aspecto defensivo. Ferro dominó desde el principio, con un buen juego ofensivo, moviendo la bola y con ataques largos lograron estar arriba en el tanteador.
Los de Villagrán contestaron con sus extranjeros y el juego individual para ponerse a tiro e irse 37-33 abajo al descanso largo.
En la segunda parte, Ferro dio muestra de carácter, mantuvo su intensidad defensiva y supo ser paciente en el ataque.
Gimnasia, en tanto, corrió de atrás, no se sintió cómodo y no supo cómo resolver en ataque la defensa planteada por los de Fernández. Con un buen cierre el festejo fue verdolaga por 77 a 67.