Platense vive días de ilusión, ya que jugará la final del Torneo Apertura ante Huracán en el estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero, y uno de los pilares de este gran momento es Leonel Picco, volante que no solo atraviesa un presente brillante, sino que además no olvida los momentos difíciles que tuvo que superar para llegar hasta acá.
“A mí Platense me cambió la vida. Yo estaba en Colón pasándola mal, donde no me tocaba jugar. Quizás no estuve a la altura, pero no pude jugar y eso me dolió mucho”, confesó Picco en charla con TNT Sports, que tuvo un paso por el Sabalero con más frustraciones que alegrías.
El mediocampista no esquivó los recuerdos de Santa Fe: “Le estoy muy agradecido a Colón, porque confió en mí cuando era un chico de Arsenal y me compró. Eso siempre va a quedar en mi recuerdo y le estoy muy agradecido, pero también fueron momentos muy difíciles los que me tocaron pasar, porque al equipo no le estaba yendo bien. Yo no jugaba directamente y me hacían sentir uno de los principales culpables. Eso me dolía mucho”.
Picco recordó lo solo que se sintió en ese momento: “Era chico y estaba solo. Fue muy difícil. Entonces apareció Platense y de un mes para otro me tocó volver a jugar, estar cerca de mi familia y con el cariño de la gente. Tuve la chance ya de jugar una final y revalorizar mi carrera”.
Hoy, convertido en figura y referente, Picco puede mirar hacia atrás con otra perspectiva. “Platense me compró. Cumplí el sueño de mi vida, que era regalarle la casa a mis viejos. A Platense le debo la vida futbolísticamente hablando”, cerró emocionado.