El presidente de Unión, Luis Spahn, habló con Diez en Deportes por LT10 y dejó definiciones importantes en el inicio de un nuevo ciclo de gestión al frente del club. Se refirió al mercado de pases, la situación política institucional, los desafíos deportivos que se avecinan y sus propias metas para esta etapa, que, según remarcó, espera que sea la última como cabeza dirigencial de la entidad tatengue.
Un balance aprobado con respeto y una oposición ausente
Spahn comenzó destacando la normalidad institucional con la que se llevó adelante la reciente Asamblea. “La satisfacción de que se llevó adelante con suma educación, con respeto y con diálogo, y que con una concurrencia aceptable se logró la aprobación de la memoria del balance”, expresó.
Consultado por la ausencia del espacio Encuentro Unionista, que no participó de la Asamblea, el presidente fue prudente: “Uno creía que, replantarse como oposición, lleva al debate y a la práctica. Ellos optaron por el silencio, dijeron que era una postura más constructiva. Es una decisión que tomaron, que no estoy en posición de juzgar; eso lo tienen que hacer sus votantes y los socios de Unión”.
Pese a la distancia, Spahn dejó abierta la posibilidad de diálogo: “Las puertas siguen abiertas. Se habló de acercar sus proyectos. Bienvenido sea. En 15 días los vamos a convocar para eso, como propusieron. Unión necesita de todos los que trabajen con buena fe y estén por debajo del club”.
El fútbol, el gran desafío
El dirigente también fue consultado sobre el mercado de pases y la planificación deportiva, justo en la previa del inicio de la pretemporada.
“Hay cuatro o cinco gestiones en curso. Una de ellas no tuvo un resultado positivo, decidimos retirarnos de la negociación porque no estaba al alcance del club pagar algo que duplicaba al sueldo de nuestro jugador mejor pago”, explicó, sin dar nombres pero marcando un límite financiero claro.
Spahn aseguró que sigue de cerca el trabajo del cuerpo técnico y que está en contacto permanente con Leonardo Madelón, coordinando con su equipo de trabajo y asesores. “Estuve ayer en Buenos Aires, reunido con Leo. Recibimos información, articulamos con gente que colabora para tomar las decisiones más convenientes”.
Un nuevo ciclo, con fecha de despedida
En medio del proceso político, Luis Spahn también habló de sus intenciones a futuro: "Yo hice un comentario sobre cuál es mi objetivo. Espero que el club no me necesite más y que nuestra agrupación genere los candidatos que ganen la confianza de los socios para conducir la próxima comisión directiva”.
Y remarcó: “Si eso se logra, cuando entregue el poder en tres años, será un sueño cumplido. Que haya una transición natural, sin auditorías ni sospechas. Con honestidad interna y con crecimiento institucional”.
Los sueños de un club más grande
Spahn también habló desde lo emocional. Al ser consultado por su visión del Unión del futuro, no dudó en compartir su sueño: “Sueño con una tribuna que engrandezca el estadio, con un predio de primer nivel, con logros deportivos y con el crecimiento de nuestra escuela. Con más, siempre con más, porque eso es lo único que puede satisfacer las expectativas del hincha de Unión”.
¿Y los títulos?
“El fútbol es dinámico, a veces muy ingrato. A los jugadores les cuesta sostener tres temporadas de alto nivel: apenas se destacan, reciben ofertas y se van. Eso complica proyectos de largo plazo”, explicó, aludiendo a la dificultad de armar un plantel competitivo con continuidad.
Aun así, dejó una frase que marca la ambición: “Unión trabaja para crecer deportivamente. Si se dan las circunstancias, tenemos que ir escalando. Con trabajo y algo de fortuna, vamos a lograr lo que ansiamos: una conquista deportiva”.
Palabra de dirigente
Luis Spahn cerró su charla con una reflexión entre seria y anecdótica, al recordar cómo se proyectan los equipos al inicio de cada campeonato y cómo se analizan con el diario del lunes: “Todos se convierten en expertos después de los resultados. Yo escuché decir que Platense iba a estar entre los últimos cinco. Y terminó metiéndose en la final. Por eso, este es un juego muy dinámico”.
Mientras el Tatengue se prepara para la pretemporada y el inicio del Torneo Clausura, Spahn deja en claro que la conducción no se improvisa: se proyecta, se planifica y, sobre todo, se construye con compromiso.