Un momento insólito se vivió durante la última emisión de LAM cuando el movilero del programa, Santiago Riva Roy, fue víctima de un robo… muy particular. Mientras cubría una manifestación frente al domicilio de Cristina Fernández de Kirchner, alguien le sustrajo su vianda con empanadas, que había dejado apoyada sobre el baúl de un auto. Todo ocurrió en vivo y quedó registrado por las cámaras.
En medio del informe, y tras escuchar los cánticos de las agrupaciones de izquierda que se concentraban en el lugar, Riva Roy interrumpió el móvil con una frase que sorprendió a todos: “Pará, te voy a contar algo… me acaban de chorear las empanadas”.
Desde el piso, Ángel de Brito reaccionó con incredulidad: “¿Se robaron? ¡No!”, mientras los panelistas contenían la risa. El cronista intentó explicar la situación: “Apoyé tres empanadas acá. Tres empanadas para dos personas y mi gaseosa… Dije: ‘sale Cristina, me voy de loco’”, relató indignado pero con humor.
Entre la tensión del contexto político y el caos en la calle, la escena tomó un tono casi de sketch. “Devuelvan las empanadas, no choreen”, reclamó entre risas Riva Roy, provocando carcajadas generalizadas en el estudio.
El episodio se volvió viral en redes sociales, donde muchos usuarios destacaron el contraste entre la gravedad de la cobertura y el desopilante percance gastronómico.
En paralelo, la jornada estuvo marcada por la fuerte noticia política: la Corte Suprema confirmó la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, por la causa conocida como “Vialidad”. A pesar del trasfondo judicial, las empanadas robadas terminaron siendo el inesperado foco del día.