Después de semanas de espera, Cristian García finalmente está habilitado para vestir oficialmente la camiseta de Colón, tras superar las restricciones del libro de pases internacional, que se abrió el pasado 1° de julio.
El mediocampista, una de las incorporaciones sabaleras en este mercado, era la gran apuesta para reforzar el mediocampo y, de hecho, se perfilaba como titular este domingo ante Chaco For Ever, en un duelo clave por la fecha 21 de la Zona B de la Primera Nacional.
Sin embargo, la ilusión por su estreno podría quedar en pausa: García habría sufrido una fuerte contractura en las últimas horas y no se descarta un posible desgarro, lo que lo dejaría al margen de la competencia por al menos tres semanas. El diagnóstico definitivo se conocerá tras los estudios médicos, pero en el cuerpo técnico ya analizan alternativas ante la posibilidad de una nueva baja sensible.
La situación golpea especialmente por el contexto: Colón acumula cuatro derrotas consecutivas y se encuentra a ocho puntos de los puestos de Reducido, en medio de una crisis futbolística e institucional que no da tregua. El DT Andrés Yllana, fuertemente cuestionado, sabe que el encuentro en Resistencia podría ser determinante para su continuidad, y contaba con García como pieza clave para recuperar equilibrio en la mitad de la cancha.
Un recorrido silencioso pero sólido
Nacido el 22 de julio de 1996 en General Alvear, García tuvo una carrera de crecimiento progresivo. Comenzó en la CAI de Comodoro Rivadavia en 2015 y luego pasó por Guillermo Brown de Puerto Madryn (2018-2021), donde disputó 39 partidos y convirtió un gol. Su perfil se consolidó con experiencia internacional: jugó en Delfín de Ecuador, donde acumuló 36 partidos y participaciones en la Copa Sudamericana, y más recientemente en Real Garcilaso de Perú, con 12 presencias como titular en este 2025.
Una pieza esperada… y ahora esperada otra vez
Colón había depositado muchas esperanzas en la incorporación de Cristian García, por su recorrido y por su perfil táctico, ideal para una categoría que demanda orden, sacrificio y liderazgo. Su presencia prometía ser un soplo de aire fresco en un vestuario golpeado, con un equipo que no encuentra el rumbo ni los resultados.
Ahora, su estreno quedó en suspenso, y dependerá de los estudios médicos para confirmar si la lesión es solo una contractura o un desgarro que lo margine por varias semanas.
Mientras tanto, el hincha sabalero sigue esperando buenas noticias en un año que, hasta ahora, solo trajo más preguntas que respuestas.