Barracas Central oficializó la llegada de un nuevo refuerzo: Tomás Lavezzi, delantero de 20 años que debutó este año en la Primera División con la camiseta de Unión. El joven atacante, hijo del exfutbolista Ezequiel "Pocho" Lavezzi, fue anunciado a través de las redes sociales del club de Parque Patricios y ya se entrena bajo las órdenes de Rubén Darío Insúa.
La noticia sorprendió por varios motivos. En abril, Lavezzi había tenido su estreno absoluto con la camiseta rojiblanca nada menos que en la Copa Sudamericana, en el encuentro ante Mushuc Runa en el estadio 15 de Abril. En ese partido, el entrenador Leonardo Madelón decidió incluirlo sorpresivamente entre los convocados y lo mandó a la cancha a los 41 minutos del segundo tiempo, cuando Unión ya había agotado su reacción futbolística.
Hasta ese momento, el juvenil no había tenido participación con el plantel profesional y venía desempeñándose en el equipo de Reserva. Su irrupción fue repentina, pero parecía marcar el inicio de un proceso de consolidación. Sin embargo, semanas después, desde la dirigencia se tomó la decisión de no ofrecerle su primer contrato profesional.
Esa decisión dejó al jugador con el pase en su poder. Y Barracas Central no dudó: se movió rápido, lo convenció del proyecto deportivo y le abrió las puertas de Primera. Todavía no se conocen los términos exactos de su incorporación —no se confirmó si se trata de un préstamo o de una cesión definitiva—, pero desde el entorno del futbolista aseguran que hay entusiasmo por esta nueva etapa.
En tanto, la salida de Lavezzi deja una incógnita flotando en el aire santafesino: ¿fue apresurado dejarlo ir sin probarlo más? ¿O simplemente una apuesta que no terminó de convencer a Madelón y compañía? Lo cierto es que ahora será en Barracas donde Tomás deberá demostrar que tiene con qué sostener el peso de un apellido ilustre y hacerse su propio lugar en la elite del fútbol argentino.