Francisco Comesaña (71° del ranking mundial) arrancó con el pie derecho en el Masters 1000 de Cincinnati, superando un doble desafío: el siempre exigente juego del español Jaume Munar (51°) y las altísimas temperaturas que reinaron en la ciudad estadounidense.
El marplatense se mostró firme de principio a fin y selló una victoria en sets corridos, por 6-4 y 6-4, para avanzar a la segunda ronda, donde lo espera el ítalo-argentino Luciano Darderi.
El servicio fue la gran herramienta de Comesaña: ganó el 77% de los puntos con el primer saque, sumó seis aces (con dos dobles faltas) y, lo más importante, salvó nueve de las diez oportunidades de quiebre que dispuso su rival. En el otro lado de la balanza, consiguió tres quiebres que marcaron la diferencia en el marcador.
Para Munar, la derrota significa una nueva caída frente a un argentino, después de haber sido eliminado por Francisco Cerúndolo en Toronto. El español ahora intentará recomponer su confianza con la mira puesta en el US Open.
El triunfo no solo le dio a Comesaña el pase a la siguiente instancia, sino que también le permitió escalar de forma virtual ocho posiciones en el ranking en vivo, situándose en el puesto 63 del mundo.