Una mujer de 40 años, con domicilio en Ibarlucea, se convirtió en la tercera víctima fatal por hantavirus en Santa Fe en lo que va del año. La paciente comenzó con síntomas compatibles con la enfermedad el 23 de diciembre, fue internada en terapia intensiva del Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria y murió dos días después.
La mujer había presentado fiebre y fuertes dolores musculares, signos típicos de la infección, y tenía como antecedente de riesgo una estadía reciente en una cabaña ubicada en Victoria, Entre Ríos, zona donde suele registrarse presencia del roedor colilargo, principal transmisor del virus.
Cómo se transmite
Las enfermedades causadas por hantavirus son zoonosis emergentes y originadas por virus que hoy conforman el género Orthohantavirus. Estos son transmitidos al ser humano por vía inhalatoria, mediante aerosolización de algunas especies de roedores, generalmente en el ámbito rural.
El cuadro clínico típico es un síndrome febril agudo con gran malestar general, frecuentemente asociado a afecciones gastrointestinales, que puede ser seguido de un inicio repentino de dificultad respiratoria e hipotensión. La provincia de Santa Fe es considerada región endémica para contraer la infección.
Medidas para evitar la infección
- Evitar que los roedores entren o hagan nidos en las viviendas.
- Tapar orificios en puertas, paredes y cañerías.
- Realizar la limpieza (pisos, paredes, puertas, mesas, cajones y alacenas) con una parte de hipoclorito de sodio y nueve de agua (dejar 30 minutos y luego enjuagar). Humedecer el piso antes de barrer para no levantar polvo.
- Ubicar huertas y leña (a 30 cm de altura) a más de 30 metros de las viviendas, cortar pastos y malezas hasta un radio de 30 metros alrededor del domicilio.
- Ventilar por lo menos 30 minutos antes de entrar a lugares como viviendas y galpones ubicados en ambientes rurales y/o silvestres en zonas endémicas que hayan estado cerrados por periodos prolongados. Cubrirse la boca y la nariz con un respirador o máscara N95 antes de ingresar.
- Tener especial cuidado en la puesta en marcha de ventiladores y de aparatos de aire acondicionado cuyos filtros o conductos puedan haber tenido contacto con polvo contaminado, roedores o excretas de estos. De tener que realizarlo, realizar la limpieza adecuada previamente y cubrirse con un respirador o máscara N95.
- Al acampar hacerlo alejado de maleza y basurales. No dormir directamente sobre el suelo; consumir agua potable.
- Si se encuentra un roedor muerto: rociarlo con hipoclorito de sodio junto con todo lo que haya podido estar en contacto y esperar un mínimo de 30 minutos. Luego recogerlo usando guantes y enterrarlo a más de 30 cm de profundidad o quemarlo.
- El control de roedores no es practicable en el medio silvestre por el impacto ecológico, sin embargo, debe aplicarse en áreas urbanas. Consultar en el municipio por el control integral de plagas.
- Ante un caso confirmado se recomienda el monitoreo de síntomas y consulta precoz cuando lo requiera.