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Jorge Drexler desembarcará por primera vez en Santa Fe, en el marco de la gira de presentación del disco “Bailar en la cueva”. En el álbum participan importantes invitados, como Caetano Veloso, Bomba Estereo, Ana Tijoux y Eduardo Cabra de Calle 13.

El show del talentoso artista uruguayo está programado para el martes 13 de mayo, a las 21hs, en la sala mayor de ATE Casa España, de nuestra ciudad. 

_ ¿Podrías contarnos cuál fue la búsqueda artística que motivó “Bailar en la cueva”?

_ Este disco estuvo separado algunos años del anterior por dos motivos: trabajé mucho en una aplicación musical para celulares que se llamó N y además, la gira de “Amar la trama” fue muy larga, y me permitió recorrer muchas ciudades de Latinoamérica, en los que no había tocado antes. En este disco se ve muy reflejada mi visita a distintos lugares de Latinoamérica. “Bailar en la cueva” busca ampliar dos territorios. Por un lado, el territorio de mis canciones que antes se habían movido entre lo intelectual y lo emocional. Ahora, también pasaron a un plano físico: son canciones que generan movimiento. También, amplié mi territorio geográfico. Salí de la identificación local, regional para llegar a una identificación continental.

_ ¿Por qué elegiste Colombia como lugar de grabación del disco?

_ Yo tengo una relación con Colombia bastante antigua. Mi abuelo materno vivió mucho tiempo en Colombia y fue un país que siempre me fascinó. Él me traía los discos de vallenatos de Alejandro Durán y yo anhelaba conocer ese mundo de fantasía que me generaba la música. Hace unos años fui a tocar a Colombia y me sentí muy cómodo con el ambiente musical, y con la sensación de un país que estaba saliendo de un período muy oscuro de su historia. Esta alegría se notaba en ciudades como Medellín. Estoy muy feliz de haber grabado este disco en Colombia y de la relación que generamos con músicos colombianos.

_ Uno de los temas que más impacta del disco es “Bolivia”. ¿Podrías contarnos la historia de esta canción?

_ Para mí, esta canción es muy importante y estoy muy feliz del lugar que ocupa en mi obra, desde ahora. Es una canción que habla de la salida de la familia de mi padre, de Alemania, en 1939, huyendo de los nazis. En ese momento tan crítico para la historia de Alemania, se cerraron las fronteras en Latinoamérica para los que querían escapar y sólo Bolivia acogió a la familia de mi abuelo. Bolivia salvó la vida de mi familia. Cuando fui a tocar a Bolivia hace algunos años me impactó muchísimo porque era el primer Drexler que volvía luego de 60 años. Quería resaltar el gesto de un país pobre latinoamericano ayudando a inmigrantes europeos. Esta es la paradoja de la historia y refleja, el carácter pendular de la historia. También quise hacer una autocrítica por la forma en que tratamos a los inmigrantes Bolivianos. Antes de escribirla, me impactó muchísimo la película de Adrián Caetano, que se llama “Bolivia”. Es una gran película; es portadora de una gran lucidez.

_ ¿Cómo surgió la idea de invitar a Caetano Veloso a participar de “Bolivia”?

_ “Bolivia es una cumbia oscura. Yo no tenía pensada la participación de Caetano Veloso. Estábamos en Bogota, cuando Caetano Veloso fue a dar un show y nos invitó al concierto. Yo lo conozco, tengo una relación cordial, pero no tenemos una amistad profunda. Yo fui invitado a participar de su disco de su cumpleaños 70 y para mí fu un honor enorme. Luego del concierto, Caetano Veloso nos invitó a cenar. En la mitad de la comida, un desconocido, al que le estaré eternamente agradecido, nos preguntó cuándo íbamos a grabar un tema juntos. Caetano Veloso dijo en la mesa que le encantaría y yo le propuse este tema. Al otro día le mandé el track y me envió su participación, que grabó con la producción de su hijo Moreno Veloso. En un mail, Moreno Veloso me dijo que les había gustado mucho esta cumbia tropicalista. En ese momento me di cuenta de la influencia del tropicalismo en este tema. Ese espíritu de integración de distintas músicas: esa fusión de cumbia peruana, con cumbia colombiana, con el tratamiento de los vientos medio Mussorgsky, con un berimbau, para hablar de temática histórica. “Bolivia” es muy tropicalista. De hecho, en tropicalia II hay una canción que se llama “Haití”, que es un referente para mi tema. Esta es la primera vez que interactuamos musicalmente con Caetano Veloso y estoy muy contento.

_ Este cruce con Caetano Veloso me recordó tu participación en el último disco de Mercedes Sosa, “Cantora”. Ese cruce con voces de un peso histórico musical.

_ Aquella colaboración está en el plano de esta. Caetano Veloso y Mercedes Sosa son voces con peso histórico, ético y artístico. Para mí, cantar con Mercedes Sosa fue un sueño hecho realidad. Un regalo impensado que me hizo la vida. Un lujo de una dimensión indescriptible. Me dio mucha pena no poder avanzar en esa relación porque cuando nos estábamos conociendo se nos fue. Yo quería aprender de ella. Además, me hizo otro regalo muy importante. A parte de grabar “Sea”, en dueto, poco tiempo después me llegó una versión en vivo de “Me haces bien”. Yo no sabía que existía. De alguna manera, esta gran matriarca del continente me devolvió el amor por esa canción. Si bien es un tema que yo quiero mucho, se había sobre expuesto un poco. Por ese motivo, yo había tomado distancia pero Mercedes me la regaló de vuelta.

_Mercedes Sosa tenía una generosidad increíble. Versionaba a muchos músicos jóvenes y diversos.

_ Es muy importante lo que decís. Ella tenía algo en común con Piazzolla, con Miles Davis, con Caetano Veloso. Ella tenía una rabiosa contemporaneidad. Mercedes Sosa se resistía a convertirse en una estatua. Ella seguía en movimiento, desconcertaba, tomaba riesgos. Ella vivía con intensidad el presente, no se ataba a la nostalgia. Esto habla muy bien de ella. Mercedes Sosa era una apasionada por la música. Yo intento moverme en este sentido; por la pasión y el entusiasmo.

_ Para cerrar la entrevista, me gustaría que le cuentes a los santafesinos cuál será la propuesta musical que va a poder disfrutar el 13 de mayo, en ATE Casa España.

_ Voy a ir con un músico en programación, dos percusionistas, tres vientos, un bajista y yo. Somos un octeto. Es un show muy expansivo, centrado en los vientos y la percusión. Los músicos vienen de Buenos Aires, de España y de Uruguay. Es una alegría ir con este formato a Santa Fe. La verdad es que no se porque se demoró tanto mi visita a Santa Fe. Para mí, este es uno de los conciertos que más espero de esta gira porque me gusta mucho ir por primera vez a los lugares. Es como una primera cita con una mujer; se viven esas ansiedades.