"Como amantes del motor, estamos aliviados y emocionados ante la posibilidad de que la F1 cobre vida, pero no debemos escondernos de la realidad. En el transcurso del fin de semana del Gran Premio de Austria del año pasado, la asistencia fue de 203,000 personas. Palidece en comparación con los más de medio millón de personas que han muerto por covid-19. Incluso el Gran Premio de Gran Bretaña, la carrera mejor concurrida de 2019, con una cifra de 351,000, no se acerca a esta cifra", afirma.
Los críticos pueden argumentar que ahora no es el momento de volver a competir. Pero tengo una visión diferente. Se ha hecho un gran sacrificio para llegar tan lejos, pero no olvidemos por qué nos hemos sacrificado. Y es vivir, vivir. La F1, como muchos deportes, trae alegría a millones de personas en todo el mundo", añade.
Steve McQueen dijo: "Correr es la vida. Cualquier cosa antes o después es sólo esperar a correr". Y hemos esperado. Independientemente del equipo al que se apoye estamos unidos por nuestra pasión por las carreras. Su capacidad de agitar el alma es única. Su capacidad para arrojar luz sobre cuán lejos hemos llegado y hasta dónde podemos llegar, no tiene límite.Por ahora, la F1 volverá a puerta cerrada, pero recuerda abrir tu corazón y mente a la magia de todo. Hemos esperado este momento que finalmente está aquí"