El viernes por la noche, el gobierno provincial anunció medidas de restricción para las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé ante el aumento de casos de coronavirus en las últimas semanas. Las mismas implican una serie de restricciones entre las que se destaca el cierre de comercios durante un lapso de 14 días.
Esta medida provocó el enojo de los comerciantes santafesinos que no acataron la medida y el sábado por la mañana, un 85% de los locales de la peatonal San Martín estaban abiertos y trabajando con los protocolos correspondientes.
Esto generó que durante todo el día del sábado, representantes del municipio, gobierno provincial y del Centro Comercial de Santa Fe trabajaron para llegar a un arreglo que beneficie a los comerciantes y cuide la salud de los santafesinos.
En diálogo con LT10, Martín Salemi, director del Centro Comercial explicó que desde principio de semana se están moviendo y trabajando, presentando “algún tipo de alternativas ante el cierre o el comentario de volver a una fase 1”. Incluso el viernes sacaron un comunicado en el que brindaban “una alternativa al cierre total”.
Sin embargo, se encontraron con un decreto provincial que “que presentaba algunas confusiones porque hablaba de peatonales y determinados metros cuadrados de locales”. Esto generó que “el comerciante, después de 180 días sin poder vender y después con ventas bajas, tomara la decisión de no respetar el decreto de la provincia y que en casi toda la ciudad, por lo menos el sábado a la mañana, los comercios estuvieron abiertos”.
“Estamos preocupados porque entendemos y creemos que hay que trabajar en consenso, ayer trabajamos todo el día para mitigar los efectos de ese decreto y en estas horas municipalidad lanzará un comunicado con algún tipo de acuerdo con provincia de un horario distinto” aclaró Salemi.
El mismo consistiría en que todo el macrocentro permaneciera cerrado pero con la modalidad take away (pedir mercadería y pasar a retirarla), y el resto de la ciudad en contra horario, es decir por la tarde de 14 a 19.30 en un principio. “Eso traería un poco de alivio a los comerciantes y que no tengan que romper con al legalidad de un decreto” acotó el representante.
“Venimos planteando que hay que bajar la circulación de la gente, y que es real que el contagio no está en el comercio porque tenemos todos los protocolos, per para bajar la circulación tenemos que volver a las compras programadas, ir a comprar y volver a nuestras casas, hacerlo para relentizar la curva de contagio y que el sistema de salud nos pueda atender” cerró el entrevistado.