Alberto Fernández sostuvo que "aún con mucho dolor" tomó "las decisiones que correspondían" en relación a las anomalías detectadas en el plan de vacunación, y ratificó que en ese proceso "hay prioridades y las reglas se deben cumplir".
"Si se cometen errores, la voluntad del Presidente es corregirlos de inmediato", dijo el mandatario al brindar su mensaje ante al Asamblea Legislativa.
El mandatario aseguró que nunca se había lanzado una política de alcance "sanitario, social y económico" como la diseñada para paliar la crisis que generó la pandemia de coronavirus.
Entre otras medidas, mencionó la tarjeta alimentar, el IFE, las disposiciones para evitar despidos o ayudar a empresas a pagar sueldos, así como la entrega de medicamentos gratuitos a jubilados, y otras que impulsaron el diálogo con empresarios y sindicatos para contribuir a las discusiones salariales, la ley de los 1.000 días para el embarazo.
"Nada es sencillo en el mundo con tanta incertidumbre y escasez de insumos críticos" ante la pandemia de coronavirus, siguieó el presidente, pero destacó que Argentina "desde fines de diciembre está recibiendo, a un ritmo menor al que acordó contractualmente, dosis de la vacuna Sputnik V".
Tras ponderar que el Gobierno "dialoga con diferentes países que producen la vacuna" y desarrolla junto a México la vacuna de Oxford y Astrazeneca, el mandatario advirtió que "el 10 por ciento de los países acapara el 90 por ciento de las vacunas existentes".