Pese a las propuestas que le hizo, Colón no pudo tentar a Gonzalo Escobar para que renueve su contrato que termina en junio de este año. Hubo una oferta a finales de 2020 que fue rechazada por ser considera insuficiente. Ante esta situación, la dirigencia se plantó en no moverse de estos números e, indefectiblemente, no hubo más avances.
Luego de la vuelta al trabajo y el inicio de la nueva temporada, los aires cambiaron y también la predisposición, a punto tal de que el club hará un nuevo –¿y último?– intento para que continúe. Es por ello que está pactada una reunión para esta semana directamente con el jugador, ya que con su representación hay diferencias.
Tal como lo expuso hace varios meses Diez en Deportes, el lateral tiene uno de los salarios más bajos del plantel y cree que debe dar un salto, algo que no es tal con los números que fueron puestos sobre la mesa inicialmente. Es muy tenido en cuenta por el DT Eduardo Domínguez, en otro aspecto que tiene en cuenta el Sabalero. Pero lo más importante, es que forma parte del patrimonio, ya que el club posee el 65% de su pase; lo otro es de Temperley.
Entonces, ante la posibilidad de que quede libre, se quiere extender su vínculo, aunque para esto será necesario un incremento "ostensible". La mano viene muy complicada, porque Escobar sabe que en poco más de dos meses se queda con el pase en su poder y puede negociar con otra institución sin intermediarios.
Un tema a seguir muy de cerca, ya que las novedades pueden darse de un momento a otro. El jugador está cómodo y se siente importante, pero dejó en claro que no a cualquier precio. ¿Logrará convencerlo Colón?