El presidente Alberto Fernández y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, volverán a reunirse a solas el próximo sábado, en el marco de la preocupación compartida por la suba de casos de Covid-19 de las últimas semanas. El encuentro tendrá lugar el sábado a las 10:00 en la Quinta de Olivos.
Tras varias horas de negociaciones este jueves, Nación y Ciudad acordaron mantener un nuevo encuentro con agenda sanitaria luego de meses de cruces.
Según se pudo saber, hubo un contacto entre el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, y el vicejefe del Gobierno porteño, Diego Santilli, en el que se empezó a hablar de "la intención de reunirse por el aumento de casos".
Luego, se llegó al acuerdo para concretar el encuentro entre Fernández y Rodríguez Larreta, que se cruzaron recientemente en un acto de la UBA, pero no se ven a solas desde hace meses tras la escalada de tensión por la quita de fondos de coparticipación a la Ciudad.
En un primer momento, se esperaba que la reunión fuese también con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, pero finalmente el ex ministro de Economía no participará.
La reunión de Fernández y Rodríguez Larreta se dará en el marco de un fuerte aumento de casos de coronavirus en todo el territorio argentino y en particular en el Área Metropolitana.
Ante este nuevo panorama, tanto la Ciudad de Buenos Aires como la Provincia dieron detalles de los nuevos planes de combate contra la pandemia, que incluyen un importante esfuerzo por continuar con la vacunación y nuevas medidas de cuidado y restricción.
A la vez, en esos anuncios se comenzaron a advertir las primeras diferencias entre las estrategias que desplegarán Kicillof y Rodríguez Larreta.
El mandatario bonaerense y su equipo de Salud ya adelantaron que lo más probable es que las medidas tomadas hasta ahora no alcancen para paliar los efectos del recrudecimiento en los contagios.
Mientras tanto, en la Ciudad, en conferencia de prensa, Rodríguez Larreta aseguró que apelarán en gran medida a los testeos y a la responsabilidad ciudadana y no buscarán restringir más actividades.
Esas distinciones en el abordaje de la pandemia ya produjeron los primeros cortocircuitos entre ambas gestiones, tal como había ocurrido el año pasado cuando los casos empezaron a crecer frente a la llegada del invierno.
También se sumó a los conflictos la quita de recursos coparticipables que sufrió la Ciudad en medio de la pandemia y cuyo destino fue financiar un aumento del presupuesto para la Policía Bonaerense.
Además, este año todo el debate estará inmerso en la contienda electoral, donde tanto Rodríguez Larreta como Kicillof tienen ambiciones personales de cara a 2023.