El último decreto que establece nuevas medidas restrictivas que comenzarán a regir en la provincia a partir del jueves 20 de mayo, impacta en el "normal" funcionamiento del comercio santafesino.
La nueva disposición establece el horario de cierre de los mismos a las 17 hs y posibilita que abran sus puertas una hora antes, a las 8 de la mañana. De esta forma, la zona de la peatonal y centro que viene funcionando en horario corrido verá poco impacto en su horario, aunque si tendrán que rever otros sectores comerciales de la ciudad, como Avenida Aristóbulo del Valle, que vienen funcionando en horario cortado.
"Mientras estemos abierto y tengamos la posibilidad de salir a pelear la pandemia y vender, estamos tranquilos y aportando nuestro granito de arena. Todos tenemos un familiar o un amigo que está pasando por el covid o que falleció y nos está pegando de cerca" aseguró Martín Salemi del Centro Comercial de Santa Fe por LT10.
Con respecto a una posible ayuda económica por parte del Gobierno, Salemi aseguró que hay una charla pendiente con las autoridades para definirla: "no somos el rubro más golpeado, están los gimnasios, los gastronómicos, pero obviamente que la restricción de circulación va a traer menos ventas y eso va a necesitar ser solventado de alguna forma por el Estado, un diferimento de impuestos o un tipo de línea de crédito".
Cabe recordar que los supermercados y comercios de proximidad dedicados a la venta de alimentos podrán tener sus puertas abiertas hasta las 19 horas.
En la jornada previa a los anuncios, Jorge Baremberg, integrante de la entidad, manifestó al móvil de LT10 que nuevas medidas restrictivas serían "un tiro de gracia" para la economía de los comercios. "Todavía estamos afrontando las deudas del 2020. Se deben impuestos, servicios, y la venta no acompañó en este tiempo las pérdidas que tuvimos".
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Aunque las medidas no sean un cierre de los locales comerciales o una reducción del horario de atención, Baremberg consideró que las restricciones en la circulación y "la cotidianeidad" para el sector es algo preocupante ya que "la gente no sale y no va a los negocios".
Además, remarcó que nunca hubo contagios en este tipo de rubros y reclamó que en casos de reuniones masivas donde debía haber actuado el Estado no lo hizo. "Aparentemente la medida más rápida que encuentran es el cierre de las actividades productivas cuando los desbordes se dan en otro lado y no se controlan", concluyó.