Durante los cuatro días del fin de semana largo, se retuvieron unas 100 motos en el marco de los controles municipales y ahora de la policía, autorizados mediante un decreto provincial.
Ante esta situación, funcionarios municipales y del Ministerio de Seguridad, mantendrán un encuentro para definir mayores funciones de las fuerzas de seguridad. Una de las medidas podría ser que la policía también pueda labrar multas a quienes estén en infracción.
"Hay problemas administrativos que hay que terminar de ajustar" aseguró el secretario de Control y Convivencia Ciudadana, Fernando Peverengo.
Sin embargo, la retención de motos se instauró como una polémica en la ciudad. Incluso, en el mediodía del lunes, un grupo de motociclistas autoconvocados protestaron frente al corralón municipal por los motivos de la retención y las demoras a la hora de recuperarlas.
Con este escenario, el Móvil de LT10 fue hasta el lugar y conversó con una mujer que estaba realizando la fila desde las 3.30 de la madrugada.
En el corralón hay unas 1.800 motos y un centenar de autos retenidos. Por mes, se compactan unas 200, y el trámite para poder retirarlas es el siguiente: primero se hacen actas provinciales de constatación (no de infracción) donde la persona no puede justificar y carece de licencia, tarjeta verde y casco -hasta el momento se hicieron 102 por parte de la Municipalidad y 83 de la policía-; luego deben ir al corralón, donde a partir de las 8.30hs el personal de Verificación de Automotores comienza a atender. Se debe abonar $150 la estadía por día y $1.250 por el traslado.
Luego se debe buscar un formulario en Automotores, que tiene un costo de $700 y donde se dan 20 turnos por día de lunes a jueves, y con ese formulario emitido volver al Tribunal de Faltas a pagar.
En última instancia se va al corralón a retirar el motovehículo.