Los incendios en Maui, en el archipiélago estadounidense de Hawái, causaron la muerte de 67 personas, según el último reporte dado a conocer este viernes, y desataron la destrucción en la ciudad turística de Lahaina, cuya reconstrucción llevará muchos años y miles de millones de dólares, dijeron las autoridades locales.
El gobernador de Hawái, Josh Green, dijo que el infierno que redujo gran parte de Lahaina a ruinas humeantes fue el peor desastre natural en la historia del estado, dejando a miles de personas sin hogar y arrasando hasta 1.000 edificios.
"La reconstrucción de Lahaina va a llevar muchos años", dijo Green en una rueda de prensa, mientras las autoridades empezaban a trazar un plan para alojar a los nuevos sin techo en hoteles y viviendas de alquiler turístico.
"Será una nueva Lahaina que Maui construirá a su imagen y semejanza, con sus propios valores", dijo Green refiriéndose a la ciudad que atrae a 2 millones de turistas cada año, es decir, alrededor del 80 por ciento de los visitantes de la isla.
El rápido incendio, que había comenzado el martes, se extendió desde la maleza de las afueras de la ciudad y arrasó la histórica ciudad de Lahaina, que fue capital del Reino de Hawái. Se trata de uno de los tres grandes incendios de Maui, todos ellos aún en llamas, alimentados por la sequía, la acumulación de combustible y las ráfagas de viento de 100 kilómetros por hora.
Aunque los bomberos siguen apagando incendios más pequeños y los equipos de búsqueda y rescate se estima aún no hallaron a todos los fallecidos, los fondos federales para la recuperación empezaron a fluir junto con suministros y equipos.
Entre la ayuda recibida se encuentran perros rastreadores de cadáveres procedentes de California y Washington que ayudarán a los equipos de búsqueda y rescate a peinar las ruinas, según las autoridades.
Miles de turistas y lugareños fueron evacuados de la parte occidental de Maui, que tiene una población anual de unos 166 mil habitantes, y algunos se refugiaron en la isla o en la vecina isla de Oahu. Los turistas acamparon en el aeropuerto de Kahului, a la espera de vuelos de vuelta a casa, mientras que algunas personas huyeron de las llamas saltando al océano Pacífico.
Green dijo que el alcance del desastre superaría al de 1960, un año después de que Hawái se convirtiera en estado de Estados Unidos, cuando un tsunami mató a 61 personas en la Isla Grande.
El condado de Maui informó en un comunicado de que el incendio de Lahaina estaba contenido en un 80 por ciento, ya que los bomberos habían asegurado el perímetro de las zonas de terreno salvaje que ardieron.
El incendio de Pulehu, a unos 30 kilómetros al este de Lahaina, estaba controlado en un 70 por ciento. No había estimación para el incendio de Upcountry, en el centro de la masa oriental de la isla, dijo el condado de Maui.
Científicos afirman que el cambio climático provocado por el hombre, impulsado por el uso de combustibles fósiles, está aumentando la frecuencia e intensidad de estos fenómenos meteorológicos extremos, y llevan mucho tiempo advirtiendo de que los países deben reducir drásticamente las emisiones para evitar una catástrofe climática.