El fiscal federal Walter Rodríguez pidió ampliar la imputación de hechos al único detenido en la causa conocida como Amarras.
Se trata de un hombre apellidado Benavidez, de 40 años, que fue detenido luego de que encontraran en un departamento que él alquilaba en el puerto santafesino, una suma millonaria en pesos, dólares, euros y reales. Además, había 39 tarjetas de débito del banco Santander y una carpeta con documentación y fotocopias de DNI.
La nota fue presentada este lunes, y en la misma, el fiscal solicita adecuar la imputación y sumar otros hechos delictivos, ya que con la documentación encontrada se lo responsabiliza no solo de tener las tarjetas en su poder, sino de haber alterados los nombres de los titulares de las mismas.
"La gravedad que lleva implícita el hecho de que Benavidez haya diversificado su intervención en 39 ocasiones valiéndose del uso no autorizado de datos" dice el texto.
Asimismo, sostiene que "la evidencia hasta aquí reunida es demostrativa de la participación material del nombrado en la etapa de la apertura de cuentas bancarias con el objetivo de operarlas bajo identidades extrañas a la propia (la de Benavidez). Tal es así, que la consignación de datos de contacto con el banco (teléfono, mail y dirección) solo eran conocidos -en principio- por Benavidez, lo que restringía la relación contractual entre las personas damnificadas y la entidad financiera".
En las entrevistas realizadas a los titulares de las tarjetas, se reveló que en muchos casos, estos accedieron a que tomaran fotos de sus DNI a cambio de una suma de dinero. En uno de los casos, un hombre declaró: “Ahora que hago memoria en el mes de junio o julio, antes de las últimas elecciones, anduvieron en el barrio cuatro personas desconocidas, ellos andaban por el barrio en un auto color azul, ofreciendo $600 pesos por el solo hecho de que le prestemos el documento para sacarle una foto, a mi me pareció raro que den plata así porque sí, pero como andaba con necesidad acepté, por eso sospecho que pudieron usar esa foto para hacer esa tarjeta. Esta gente creo que eran políticos o punteros políticos pero no se para que partido, no tenían ninguna propaganda y solo te daban plata si no le permitía sacar foto del documento, decían que era una ayuda pero con esa condición”.
Otros de los entrevistados afirmó que "hace tres meses en la plaza del barrio unos políticos me dieron $2000 pesos a cambio de que le preste mi DNI, ellos sacaron una foto y te daban la plata (…) yo lo hice por necesidad, ese día muchos vecinos se acercaron para agarrar la plata que esta gente daba".
De esta forma, Rodríguez sostiene que "existe un estado de sospecha suficiente respecto de Ángel Yamil Benavidez, en punto a que la alteración de datos aludida produjo un daño a la fe pública -jurídicamente relevante-, sobre la cual reposa la confianza de los ciudadanos acerca de un determinado objeto o instrumento, en este caso 39 tarjetas de débito, respecto de los cuales el nombrado tiene derecho a ejercer su defensa material".