El tiempo pasa y Unión sigue sin levantar la inhibición por adeudarle a Deportivo Capiatá de Paraguay el pase de Junior Marabel, que terminó su préstamo en General Caballero. Las restricciones del dólar y la meta de pagar a una cotización oficial demoró todo y por eso, se llega a esta situación que quebró la paciencia de los guaraníes, que esperaron varios meses una respuesta.
Es por ello que accionar ante FIFA y estarían firmes. Ahora que se está en pleno mercado de pases, la dirigencia rojiblanca busca los caminos para cancelar los 500.000 dólares (que serían 600.000 por las costas y gastos), ya que sino quedaría imposibilitado después de utilizar los refuerzos.
Ahora que hay nuevas normativas por el gobierno entrante respecto al manejo de moneda extranjera, se pueden abrir puertas. El tema está en que Capiatá pretendería el pago total y no cuotas. Si bien es cierto que para los números que maneja el fútbol quizás no sea algo tan abultado, para la enorme distancia que hay en Argentina respecto al peso, es todo un tema y por eso la complicación.
Unión tendría el dinero, pero siempre esperó la autorización de Banco Central para abonar una cotización más "saludable", como lo enfatizó siempre el presidente Luis Spahn. Habrá que ver si en este año que comienza se puede resolver esta situación que se vuelve cada vez más incómoda.