El femicida Fabián Tablado, tristemente recordado por el brutal asesinato de Carolina Aló en 1996, volvió a ser foco de atención. La causa: la pérdida de señal de la tobillera electrónica que debe usar por mandato judicial. Este hecho generó una nueva ola de preocupación entre la familia de la víctima y la opinión pública en general, quienes temen por las consecuencias de esta situación.
Tablado, condenado por propinarle 113 puñaladas a su novia, Carolina Aló, se encuentra en libertad bajo ciertas condiciones, entre ellas el uso de una tobillera electrónica para su monitoreo constante. Sin embargo, el pasado viernes, la familia de Carolina alertó que se perdió el rastro de este dispositivo, lo que generó un ambiente de incertidumbre y temor.
Un evento que encendió las alarmas
“Desconozco si hay un pedido de detención en mi contra. Fue una pérdida de señal. En ningún momento me fugué”, fueron las palabras del propio Fabián Tablado durante una entrevista con el canal Crónica. Su explicación parecía buscar minimizar el hecho, pero no logró disipar las preocupaciones. En la misma conversación, Eduardo Aló, el padre de la víctima, fue categórico: "No podemos saber dónde está el asesino". Tanto él como los abogados de la Fundación Carolina Aló recibieron una notificación del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) que advertía sobre las irregularidades con la señal de la tobillera.
Eduardo Aló relató que la señal del dispositivo comenzó a “salir y volver” repetidamente, lo que generó incertidumbre acerca de la ubicación exacta de Tablado. Aunque el femicida asegura que se encuentra en la Fundación Filipos en la ciudad de Posadas, Misiones, la preocupación no disminuyó.