Colón está motivado por las dos victorias en fila y se acomodó mejor en la lucha por la cima de la zona B de la Primera Nacional. Fue clave que Nueva Chicago y San Telmo perdieron para quedar a tres puntos y encarar el cotejo ante Chaco For Ever con un semblante superador.
No hay margen de error, por lo que todo pasará por sumar lo máximo posible y esperar que los rivales dejen puntos en el camino. Algo probable por la paridad que hay y por algunos deberán jugar entre sí. Un Sabalero que encontró orden de la mano de Diego Osella, que le da continuidad también a lo que propuso el interinato de Martín Minella.
Sobre todo, la apuesta por algunos pibes del club que aparecieron en un momento clave para empujar. Iván Delfino prácticamente no le dio lugar a los chicos. Salvo minutos al comienzo para Lucas Picech y Alex Aranda, hasta el debut de Alan Forneris.
Con Rodolfo De Paoli fue similar, con la vuelta de Facundo Taborda, que no jugaba desde la estadía en Primera División. Ahora se sumaron Thiago Yossen y Zahir Yunis, que piden pista. En pocas palabras, Colón encontró lo que no tuvo durante gran parte del año en el momento culminante.
Un sentido de pertenencia que se pedía y los chicos, con mucho por aprender, quieren hacerse un lugar y dar la talla en busca del objetivo.