Este domingo 13 de abril, más de 13 millones de ecuatorianos participarán de una segunda vuelta electoral y en un país marcado por la polarización política y la incertidumbre sobre el futuro, la violencia y la inseguridad, se definirá el futuro de la región entre el actual mandatario Daniel Noboa, quien busca la reelección; o a la candidata del correísmo, Luisa González.
Según indican las encuestas, los candidatos llegan a la jornada electoral en un escenario de empate técnico y luchan voto a voto en una jornada en la que, según los especialistas, el apoyo de las comunidades indígenas será clave para lograr el triunfo.
Noboa y González sellaron una primera vuelta el pasado 9 de febrero, con una diferencia de 16.746 votos a favor del actual Presidente.
Noboa, de 37 años y candidato del oficialista Movimiento Acción Democrática Nacional (ADN centro), busca ser reelecto para prolongar su mandato por un periodo completo (2025-2029) y González, abogada de 47 años, pretende convertirse en la primera mujer en llegar a la Presidencia de Ecuador, representando a las fuerzas progresistas, sociales y de izquierda.
González asegura que Noboa se prepara para denunciar un fraude
La candidata presidencial de la izquierda ecuatoriana, Luisa González, ha asegurado en un mensaje grabado que su rival en la segunda vuelta de este domingo, el presidente Daniel Noboa, está "sembrando actas de votación" para denunciar un fraude ante una eventual derrota.
“Hago pública mi denuncia ante las acciones desesperadas que, una vez más, el gobierno nacional del candidato-presidente pretende implementar en las próximas horas. Nos informan miembros de Inteligencia de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas que a través de montajes y operativos están sembrando actas de votación en diferentes regiones del país. Esos falsos positivos buscan construir la idea de fraude ante su inminente derrota”, dijo González en sus redes sociales.
Noboa ganó la primera vuelta electoral celebrada en febrero por solo 17.000 votos de ventaja sobre González. Los sondeos para la segunda vuelta anticipan un resultado igual de ajustado, con diferencias a favor de uno u otro candidato que están dentro del margen de error estadístico.