La basura electrónica es un problema que preocupa a nivel mundial. Los dispositivos que no usamos más contienen plomo, mercurio y cadmio: venenos invisibles para el suelo, el agua y el aire. Además, la aceleración del consumo y la obsolescencia programada han hecho que se multipliquen exponencialmente en los últimos años.
Un equipo de docentes de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH) y del Centro Universitario Gálvez (CUG) de la Universidad Nacional del Litoral elaboraron un proyecto para mejorar la gestión de los residuos electrónicos en Gálvez.
Consiste en la capacitación de miembros de la comunidad y la elaboración de un plan de recolección diferenciada y tratamiento responsable. Para esto trabajarán con el Municipio y con las instituciones educativas de la ciudad. Ulises Mendoza, docente del equipo, visitó De Diez para contar sobre esta iniciativa.