La Justicia de Brasil determinó un nuevo bloqueo de la aplicación de mensajería móvil WhatsApp. El fallo de la jueza de Río de Janeiro, Daniela Barbosa de Souza, ordenó la suspensión del servicio en todo el país.
Los operadores de telefonía fueron notificados por el Tribunal de Río a las 11:30 y la orden fue la de interrumpir inmediatamente el servicio. De lo contrario, las empresas estarán sujetas a una multa diaria de 50.000 dólares.
Ésta es la tercera vez que la aplicación es bloqueada en el país. La jueza dijo que a Facebook, la empresa propietaria de WhatsApp, se le pidió tres veces que intercepte mensajes relacionados con una investigación en curso, la cual es "confidencial" y que se realiza en Duque de Caxias, en la Baixada Fluminense.
En mayo, la aplicación había sido bloqueada por un fallo del magistradoMarcel Montalvão, de la ciudad de Lagarto (Estado de Sergipe, al noroeste del país). Los fundamentos del fallo de Montalvão habían sido los mismos que llevaron a dictar la detención de Diego Dzodan, vicepresidente para América Latina de Facebook -la empresa que posee la aplicación-, en marzo de este año.
La compañía es acusada de incumplir órdenes judiciales que obligan a revelar mensajes de usuarios de la aplicación, en un caso de crimen organizado y narcotráfico. La Justicia pidió en mayo a las compañías telefónicas TIM, Oi, Vivo, Claro y Nextel, que bloquearan el popular servicio durante tres días.
En diciembre del año pasado, la aplicación fue bloqueada durante 48 horas debido a una investigación criminal. En ese momento, las autoridades habían logrado el permiso judicial para que WhatsApp levantara el secreto de los datos intercambiados por sospechosos, pero la empresa no obedeció la orden judicial.
El servicio de mensajería volvió a funcionar tras la decisión de un tribunal de San Pablo de levantar el bloqueo que había provocado indignación entre millones de usuarios.
La primera sentencia contra la aplicación fue en febrero de 2015, en el estado de Piauí, aunque el fallo judicial no llegó a ser efectivo al ser anulado por otro magistrado. La aplicación móvil se había negado a colaborar con una investigación criminal relacionada con menores de edad involucrados en delitos. La anulación se sustentó en que las operadoras de telefonía no pueden ser responsabilizadas por la demanda que afecta a WhatsApp.