Unas 20.000 personas de todo el país soportaron un diluvio para, horas después, participar de la celebración de la canonización de José Gabriel Brochero, el "cura gaucho" que desarrolló en este pueblo de Traslasierra la mayor parte de su obra.
La multitud siguió en pantallas gigantes la misa en la que el papa Francisco convirtió en santo a Brochero, pero la vigilia comenzó antes de medianoche con visitas a la iglesia Nuestra Señora del Tránsito.
Lágrimas, gritos de alegría y cantos recibieron al primer santo argentino que en este pueblo en el que hoy viven 8000 personas fundó una escuela, un oratorio e hizo caminos y obras claves.
En el predio del santuario -convertido en un barrial por la lluvia- se multiplicaron las reposeras, los mates, las bolsas de dormir y las velas encendidas de la vigilia.
Alrededor de las 4 de la madrugada el ingreso fue masivo y una hora después la impaciencia por la conexión con la misa en el Vaticano ganó el predio. A las 5:16 cuando en la plaza de San Pedro mencionaron a Brochero por primera vez, la multitud ovacionó. También en la Catedral de la ciudad capital y en la tierra natal de Brochero, Santa Rosa de Río primero hubo vigilia.